Archive for the 'paisaje de la serranía' Category

Paisajes de la Serranía de Ronda: El Pantanillo

Andrés Rodríguez González Enero 21st, 2023

Hoy traemos un paisaje de singular belleza e interés a esta serie. El Pantanillo es un pequeño embalse sitado en el término municipal de Montejaque que sirvió para aportar agua con la que fabricar el hormigón de la presa de Los Caballeros, conocida popularmente como Pantano de Montejaque, se construyo en los años 30 del siglo pasado.

Podéis ver unas imágenes en la siguiente dirección de youtu.be

https://youtu.be/_0FWf9JxNhM

PAISAJES CALIZOS EN LA SERRANIA DE RONDA: LLANOS DEL CHOPO Y DE ZURRAQUE

Andrés Rodríguez González Enero 9th, 2023

Un paisaje calizo: Llanos del Chopo y Llano de Zurraque


Quejigo en Llano de zurraque.

El Puerto de los Alamillos está situado en las cercanías de Grazalema, en el cruce de la carretera de Ronda con la que lleva desde Villaluenga a Grazalema. Iniiamos el paseo en una explanada junto a la Venta que allí se ubica.

El carril discurre entre paisajes humanizados con casas de campo y parcelas hasta un pinar situado sobre un pequeño cerro de rocas areniscas, el camino se bifurca, debemos tomar el carril de la derecha que nos lleva a un esplendido llano por donde discurre el río Gaduares o Campobuche, un curso de agua que marcha en dirección Este al contrario que la inmensa mayoría de los ríos y arroyos de esta parte de la Serranía de Ronda que discurren hacia el Oeste. Antes de pasar sobre el río nos detenemos para admirar la cercana y espectacular Chaparra de las Ánimas, un alcornoque con categoría de Monumento Natural Andaluz, su nombre se debe a que el dinero obtenido de la venta del corcho que de él se obtenía se destinaba a misas y a velas por las ánimas del purgatorio.


Chaparra de las Ánimas.

Seguimos el carril que pasa sobre el río con un pequeño puente, nos adentramos en un hermoso alcornocal de grandes ejemplares, por desgracia, alguno es víctima de perforadores y enfermedades como la pudrición de los troncos que llevan, junto a la potencia de los vientos, a lo que parecía imposible que ocurriera, el derribo y la muerte de alguno de estos gigantes.

Un pequeño puertecillo nos lleva hasta un gran “Llano” por donde discurre el arroyo del Chopo que va acompañado aguas arriba por un farallón calizo con multitud de encinas y chaparras. Estas zonas más o menos llanas se cultivaban de cereales hasta tiempos no muy lejanos, actualmente se destinan a la ganadería de ovejas y de vacas. Esos valles son las zonas agrícolas más productivas del proceso kárstico que explicaremos más adelante, según el tamaño se denominan dolinas, uvalas o poljes. La presencia humana ha debido ser importante desde tiempos remotos como lo atestigua el Dolmen del Chopo o de Patagalana, situado a pocos metros, en un pequeño llano en el otro margen del arroyo.

Abandonamos camino principal que traíamos y continuamos nuestro paseo siguiendo un camino que tiene el cauce del arroyo a su derecha. Pasamos dos cancelas metálicas y dejamos atrás un pozo de acumulación de agua y un pilón de piedra partido, fue una pila de lavar trabajada en piedra arenisca, iniciamos una leve subida entre hermosas encinas que nos acompañan hasta un farallón de rocas calizas donde encontramos una curiosa encina en cuyo tronco crece una hiedra. Con cierto atrevimiento y al desconocer si tiene nombre propio, la hemos llamado “la Encina Preñá”. Muy cerca veremos un espectacular y retorcido tronco cortado de una gran encina. En el murallón calizo crecen higueras, potentes hiedras y solitarias encinas que parecen hacer equilibrio en su supervivencia sobre el abismo. Multitud de pájaros nos acompañan, entre ellos es frecuente ver jilgueros, colirrojos tizón y tarabillas, hasta el muy raro por aquí martín pescador hemos visto en laguna ocasión. En el cielo sobrevuelan los cernícalos, algún águila y los grandes buitres leonados.


Tarabilla en espino majoleto

El camino inicia una descarada subida hacia la derecha hasta llegar a una alambrada donde debemos buscar una angarilla en escalera para pasar a otra finca ya en terrenos calizos. Allí aparece la vieja y retorcida vereda que debemos seguir, pronto nos deja ver por la izquierda un ejemplar enorme de encina derribado y muerto con el tronco partido y una lámina vertical de roca caliza de grandes dimensiones con una deteriorada pared de piedra a sus pies, en realidad servía como aprisco de ovejas, estamos en el Hoyo de la Matanza, un lugar donde ocurrieron unos terribles sucesos que culminaron con el asesinato de varios maquis después de la Guerra Civil. Los espinos majoletos o majuelos son abundantes por toda la zona y casi siempre están parasitados por muérdago. Los rosales silvestres se dejan notar con sus defensas en forma de espinas afiladas.


Encina en pared de roca caliza


Curioso tronco de encina


Llano de la Matanza

Continuamos el paseo por la vieja vereda hasta llegar a un recoleto y paradisiaco llano que nos sorprenderá por su belleza y la paz que allí se respira. Entramos en el Llano de Zurraque. El nombre hace referencia a Zumaque, una planta usada por los árabes para el curtido de cuero y tinción de tejidos. Son seiscientos metros de llanura rodeada de rocas calizas. Tiene una charca en medio del llano donde se supone que debe haber un sumidero taponado, la charca está rodeada por una alambrada para que no acceda el ganado vacuno que allí se pastorea. Por cierto se deben extremar las precauciones y no acercarse a las vacas sobre todo si tienen terneros. Si se sigue la dirección que marca la flecha formada por piedras en el suelo, se llega al otro extremo del llano que en total tiene unos seiscientos metros de diámetro. El camino se puede continuar hasta llegar a los Llanos de Libar y Montejaque. Una pequeña casa al fondo del llano a la derecha nos indica que estamos en una propiedad privada.


Llanos del Chopo con Sierras de Grazalema al fondo

Es el momento de descubrir que es y cómo se forma un relieve Karstico.

Se denomina Relieve (o Proceso) Karstico a los paisajes producidos por erosión del agua sobre rocas calizas. Su nombre proviene de una zona entre Italia y Eslovenia donde más representado se encuentra este paisaje.

Este tipo de relieves se origina por el arrastre o acumulación de materiales solubles y no solubles, como los que están constituidos por los carbonatos de rocas calizas y margocalizas atacados por el agua de lluvia. El relieve sólido y va disolviendo la roca en función de las condiciones del ambiente y por lo general se caracteriza por la ausencia de agua superficial debido a la filtración de la misma.

Este proceso genera variedad de formas como cañones, cuevas de estalactitas, sumideros, dolinas, torcales o poljés, entre muchas otras. Este tipo de formaciones representan la evolución geológica durante miles de años. El relieve kárstico puede darse externamente o y internamente.

El proceso de formación del modelado kárstico es relativamente lento, se produce en zonas calcáreas, donde las rocas calizas experimentan una variación en su composición química con la acción del agua. La disolución de las calizas se debe un proceso químico por el cual el dióxido de carbono de ciertas aguas ácidas  interactúa con la roca caliza creando bicarbonato cálcico, que es altamente soluble. Por tanto, cuando las aguas, tanto superficiales como las subterráneas penetran en las fisuras de estas mismas rocas, van disolviéndose hasta crear las formas tan características de este tipo de paisajes.

Por tanto, las alteraciones químicas de las que hablamos son las que forman elementos del paisaje kárstico, que pueden ser exokársticas (es decir, que se forman en zonas exteriores como los lapiaces) o endokársticas (es decir subterráneas como cuevas).

La forma más típica del relieve kárstico es el lapiaz o lapiaces . Se trata de grietas superficiales que pueden llegar a medir algunos metros, caracterizadas por estar separadas por paredes o tabiques de la misma roca. Por lo general se suele encontrar en zonas llanas, a veces en las partes altas de los macizos calcáreos, con grietas o fisuras por las que discurre el agua, y con el paso del tiempo algunos lapiaces terminan convirtiéndose en cañones y otros tipos de relieve kárstico.

Por su parte, las dolinas son depresiones circulares y cerradas que llegan a alcanzar grandes dimensiones. Se trata por tanto de una especie de valle redondeado con paredes inclinadas, que puede generar cuevas o terminar inundado. Esta formación también es conocida bajo el nombre de torca. En la zona de Grazlema se les llama Llanos, en zonas más próximas a Ronda se les llama de diversas formas, como Navas, Navetas, Navasillo, Navazo (dependiendo del tamaño). Si muchas dolinas terminan juntándose creando una sola forma kárstica, se denomina Uvala, y deja de ser circular para tener una forma alveolar.

Por su parte, los Poljés son las formas kársticas más grandes que podemos encontrar, llegando a medir hasta kilómetros, como los Llanos del Republicano y de Libar. Se trata por tanto de depresiones muy extensas caracterizadas por tener un fondo plano y que por tanto se encuentra cerrada por laderas muy escarpadas. En teoría se trata de una uvala (es decir, muchas dolinas juntas) muy extensa. Aún así, en el interior de un poljé podemos encontrar las formas kársticas anteriores.

A las Hoces, los Cañones o los Desfiladeros, en la Serranía de Ronda se les suele llamar Tajos. En realidad son valles estrechos y profundos que han sido creados por la acción de los ríos.

Formas endokársticas son manifestaciones del relieve kárstico en zonas subterráneas, dan lugar a cuevas, grutas y otros muy llamativos.

Las cuevas son las formas endokársticas más comunes, y se forman gracias a la filtración del agua por las rocas con fisuras. La forma kárstica más típica en estos casos son las estalactitas, que se forman a partir del agua y el carbonato cálcico; o las estalagmitas, que se forman gracias al agua del suelo.

Por su parte, las simas son grandes aberturas en la roca que se comunica directamente desde las galerías subterráneas a la superficie.

Por último, debemos hablar de sumideros, que son aperturas por donde fluye una corriente de agua superficial hacia un sistema de agua subterránea.


Enorme tronco de encina partido en el Hoyo de la Matanza.


Muerdago sobre majuelo.


Vaca

Bibliografía

https://biologia-geologia.com/

http://g3ol0.blogspot.com/

Video

https://youtu.be/7MgzKEsbguI

Paisajes de la Serranía de Ronda: Llanos del Alamo y Zurraque. Video

Andrés Rodríguez González Enero 4th, 2023

Hoy presentamos un vídeo sobre un tipo de paisaje muy característico de la Serranía de Ronda: El Modelado Karstico. En este caso visualizaremos los Llanos del Álamo y el Llano de Zurraque.

https://youtu.be/7MgzKEsbguI

PAISAJES DE LA SERRANÍA: FRANCISCO FLORES ARROCHA

Andrés Rodríguez González Diciembre 20th, 2019

PAISAJES DE LA SERRANÍA:

FRANCISCO FLORES ARROCHA 

El 31 de diciembre de 1932 murió tiroteado por la guardia civil el considerado último bandolero de la Serranía de Ronda.  Va ha hacer 87 años de aquellos terribles acontecimientos.

Francisco Flores Arrocha era de Igualeja y poseía un buen rebaño de cabras que le permitía vivir con cierta holgura económica, ni él ni su familia pasaba hambre. Era natural de un pueblo de la Serranía de Ronda, Igualeja, estaba casado con María Gil, de Parauta. Francisco, como otras personas, quiere ampliar sus tierras e intenta comprar a su suegro una finca conocida como “La Mentirola”, en La Fuenfría, próxima al lugar donde tenía su rebaño en tierras arrendadas. A pesar del parentesco, el suegro se niega a venderle el trozo de tierra y prefiere vender a un primo de Flores Arrocha llamado Salvador Becerra Flores. Al parecer esa finca se la había prometido su suegro a Flores varios años antes, por lo que el proceder a venderla a su primo Salvador, con el que se llevaba bien, fue interpretado por Flores como una afrenta grave.

Es necesario situarse en la época y en el lugar del que estamos hablando, la Serranía en general e Igualeja en particular donde existe un sentido de la propiedad exagerado y un afán de poseer más terreno, más castaños y más de todo que el vecino o el familiar. A Flores, en su pueblo, le calentaban la cabeza con el trato del suegro con el primo, pero él siguió intentando hacerse con La Mentirola, vendió parte de su ganado para conseguir dinero en efectivo con el que pagar el terreno y abonar la señal que había dado su primo que, tal vez por no escucharle, aparentemente cedió en los derechos de compra ya adquiridos. Una vez vendido parte del ganado, Becerra se desdice y sigue adelante con el trato de la finca; al parecer, el hermano de Becerra le quita todos los pastos que Flores tenía arrendados, alegando al propietario que Flores ya no tenía animales, cosa que era incierta, ya que no había vendido todas las cabras. El plan era arruinar a Flores y echarlo de las inmediaciones de la finca. El suegro sigue sin ver clara la posible venta a su yerno y termina por vender definitivamente las tierras a Becerra. Flores le ofrece hasta 10.000 reales más por la recompra, sin el menor éxito.

Ante el desarrollo de los acontecimientos Flores Arrocha jura vengarse. Adquiere en Ronda un escopeta y se pavonea por el pueblo hablando de justicia y muerte. En septiembre de 1931 se dirige armado a la casa de su primo, cuentan que le sorprendió en la vereda a lomos de un mulo en el que llevaba a su hija pequeña, después de intentar una vez más recomprarle la finca, le amenaza e intenta sujetar las riendas del mulo, Salvador más fuerte y desde lo alto del animal le da un manotazo, Flores da unos pasos en dirección contraria a la de Salvador que ya ha reanu8dado la marcha a la Fuenfria, pero en lugar de alejarse, Flores se echa la escopeta a la cara y por la mala visibilidad o por que era un mal tirador, dispara hiriendo a Becerra y matando a la hija que se había puesto en la parte de atrás del mulo.

Flores Arrocha es perseguido por la justicia no tiene otra salida que “echarse al monte”, es acompañado por un sobrino llamado Pedro Flores y apodado “Cerrerías”. Se enfrenta varias veces a tiros con la guardia civil sin ser atrapado. El revuelo ocasionado por la aparición de un “bandolero a la vieja usanza” es potenciado por la prensa de la época que desplaza gacetistas a Ronda donde recogen todas las fantasías que se cuentan en tabernas y barberías, pero que nunca se desplazaron a los campos donde estaba Flores.

Entretanto Becerra se recupera de sus heridas y vuelve a vivir en la Fuenfría, pero como Flores Arrocha ha jurado matarlo, la Guardia Civil establece un retén de vigilancia en la Fuenfría, en unas antiguas casas de mineros situadas muy cerca de la casa de Becerra.

La vida de Flores continúa entre el monte y su pueblo donde dicen que regresaba por las noches para recoger víveres, tabaco y yacer con su mujer.

El 7 de diciembre de 1932 aprovechando que los efectivos de la Guardia Civil de la comarca son reclamados para sofocar un tumulto social que había estallado en Benahavís, Flores Arrocha y su sobrino se acercan a la finca de la disputa todo lo que pueden favorecidos por la niebla, disparan y matan a Salvador Becerra que en ese momento araba con un hijo ya mayor que puede huir herido. Después se dirigen a  la casa matan a su mujer y a otro hijo.

La gravedad y crueldad de los hechos refuerzan los intentos de captura, a finales de diciembre un chivatazo a la Guardia Civil de Parauta situa a los proscritos en una zona conocida como la “Majadilla de la Sierra”, concretamente en “los Chozos de Canca”, no lejos de la Fuenfría, allí se dirigen el jefe del destacamento, el cabo Lanzas, los seis guardias del puesto a quienes en el camino se unen tres más del puesto de Igualeja.

El 31 de diciembre localizan en ese sitio a los dos fugitivos, se entabla un intenso tiroteo que se salda con la muerte del guardia Teodoro López y del propio Francisco Flores Arrocha. Cuentan que Flores cubrió a su sobrino para que se salvara, aguantando a los civiles hasta que se le acabó la munición y fue abatido.

La gente del pueblo justificó las muertes que, al parecer, cometió ya que tenía derecho de tanteo como vecino que era, sobre las tierras de la Fuenfría que su suegro no quiso venderle. Así lo cantaba una coplilla que me ha contado mi amigo Felipe Canca que entonces tenía cuatro años y vivía en unas chozas situadas en la Majadilla de la Encina, muy cerca del Arroyo Hondo, donde mataron a Flores. De esa coplilla popular Felipe recuerda alguna estrofa:

“Un 31 de diciembre fue el día que mataron a Flores Arrocha por una tierra que por ley le correspondía”.

Fue el último bandolero de la Serranía, si bien a Pasos Largos lo mataron dos años después, en 1934, era ya un anciano con 64 años, sin causas pendientes con la justicia al que unos desalmados mataron en la covacha de Sopalmito para hacer méritos ante la guardia civil para que les permitieran seguir furtiveando.

Incluye una foto de La Fuenfría realizada por Vicente Astete a quien agradezco me ha ya permitido usarla.

Bibliografía

Bandoleros en la Serranía de Ronda. Isidro García Cigüenza. 1998. Editorial Guadiaro.

https://wikanda.es

Paisajes de la Serranía: Lagarin y Las Grajas

Andrés Rodríguez González Abril 25th, 2018

Son dos balcones naturales que permiten disfrutar del paisaje de la campiña gaditana, también de la sierra y del Parque Natural de Grazalema. Por supuesto de la Meseta de Ronda y las montañas que la rodean. El Lagarín, para otros llamado Algarín, se eleva hasta los 1067 metros de altura y el pico de Las Grajas casi igual, 1042 metros sobre el nivel del mar. Desde el pueblo de El Gastor se puede realizar un interesante recorrido hasta esos hermosos picos montañosos.

PAISAJES DE LA SERRANIA DE RONDA El Embalse de Montejaque o de Los Caballeros:

Andrés Rodríguez González Abril 17th, 2018

PAISAJES DE LA SERRANIA DE RONDA
El Embalse de Montejaque o de Los Caballeros

La idea de construir una presa en la zona de Hundidero surge en los primeros años del siglo XX. Unos geólogos, como Gavala, están a favor y otros como el portugués Fleury, en contra.
La empresa Sevillana de Electricidad decide emprender la dificultosa tarea, para ello contrata una empresa sueca, Sociedad Anónima Sueca de Sondeos en Diamante, con grandes dificultades comienzan los proyectos en 1922, se construyen carreteras, se preparan los terrenos, se contrata técnicos y obreros desde enero de 1.923, el día 12 de octubre de ese año comienza el levantamiento del muro de hormigón de la presa. Los trabajos se hacían durante 24 horas al día, 7 días a la semana en tres turnos de trabajo, de seis de la mañana a dos de la tarde, de 2 a 10 de la noche y de esa hora a seis de la mañana, las grandes dificultades del terreno y diferentes problemas laborales retrasan y encarecen la construcción. En el aspecto social y laboral fue verdaderamente revolucionario, todos los obreros trabajaban en turnos rigurosos de 8 horas, con contrato. El 26 de marzo de 1.924 se termina el muro de la presa.
El gran problema del embalse es que la roca caliza sobre la que está construido presenta gran cantidad de grietas que ocasionan la pérdida del agua almacenada, bien pronto se manifestó la inutilidad del embalse, se trató de tapar las fisuras con cemento y asfalto, hasta se intentó impermeabilizar el fondo del embalse con arcilla, nada se consiguió sino gastar más dinero en una obra que ya era faraónica en sus planteamientos. La solución de taponar las surgencias de agua en el interior de la Cueva de Hundidero Gato tan solo permitieron abrir una comunicación entre ambas bocas de la cueva que se completó en septiembre de 1.929. Los intentos de impermeabilización continúan de forma intermitente durante los años siguientes, la llegada de la Guerra Civil marca el fin de la ilusión de retener el agua en el Embalse.
A pesar de ello, los naturales de la zona aún dicen que la construcción del Embalse de Montejaque fue muy positiva “porque dio muchos jornales”. Muy propio del espíritu serrano.

Esta fotografía es de mi amigo y antiguo alumno Juan Cartlkos Guerrero a quien agradezco que me haya permitido usarla.

PAISAJES DE LA SERRANÍA Las Navas

Andrés Rodríguez González Abril 3rd, 2018

PAISAJES SERRANIA

Las Navas


Llanos del Hierro. Carratera de Montejaque al cruce carretera de Sevilla a Ronda

Con el nombre de Nava, Navazo, Naveta y Navasillo se designan en la Serranía de Ronda una serie de  formaciones geológicas propias de las montañas calizas. Son zonas llanas, con suelo arcilloso procedente de la meteorización de las calizas por efecto de la atmósfera, muchas de ellas tienen en la parte central un sumidero por donde se escapa el agua que se acumula en momento de intensas lluvias. Esa agua puede pasar a capas profundas del suelo en forma de aguas subterráneas o salir al exterior formando fuentes o surgencias. También puede ocurrir que el sumidero no exista o se encuentre obstruido y el agua evacue por medio de arroyos. Pueden ser de un tamaño considerablemente grande, técnicamente llamados Poljes o de tamaño más reducido, llamados Dolinas o incluso de muy pequeño tamaño.

En la Serranía los de gran tamaño, verdaderos valles entre altas montañas calizas se les suele denominar “Llanos”, como los del Republicano o Libar, los denominados “Navazos” como el que lleva ese nombre situado en el Cordel de Los Pescaeros, cerca del cruce de Igualeja en la carretera de Ronda a San Pedro de Alcántara son de menor tamaño, algo menores las llamadas “Navas” y “Navetas”, como la Nava de los Pinsapos en la Sierra de Las Nieves. Las de menor tamaño se suelen denominar “Navasillos” como la situada frente a una venta a la que da nombre en la carretera antes nombrada.

Esos llanos eran cultivados en los tiempos pretéritos cuando los terrenos albergaban una población que se dedicaba fundamentalmente a la ganadería y obtenía unos escasos cereales en los menguados terrenos que se podían cultivar. Es digno de resaltar como en las cercanías de muchos de estos llanos o navas aún se encuentran los restos de las eras donde se trillaba y se obtenían los cereales.

Paisaje de la Serranía de Ronda: La Nava en Verano

Andrés Rodríguez González Septiembre 5th, 2017

La Nava me acuna.

Tres de septiembre. Para mí, ir a La Nava, en cualquier época del año, me aporta paz interior y relajación. Fue el primer lugar de la Sierra de Las Nieves que conocí llevado por D. Julian de Zulueta que me presentó al padre del actual dueño y al guarda, Manuel, de ambos aprendí mucho, después he visitado la finca muchas veces. Allí he vivido muchos de los mejores ratos de mi vida, conocí a un personaje que me inspiró alguno de mis relatos, Felipe, que me mostró la bondad y naturalidad de las gentes del campo. En sus casas rurales tengo algunos de los mejores recuerdos familiares. Tengo la suerte de gozar de una vieja amistad con Paqui, Tom y sus hijos.

Recuerda que es una propiedad privada, por lo tanto el acceso puede ser denegado por los dueños, entre otras cosas porque se esté cazando. Pide siempre permiso y no recolectes fauna, ni flora, ni piedras ni cuernas de animales. Siempre puedes alquilar una estancia en sus casas rurales.

En esta visita que contó con los permisos necesarios, Gonzalo y yo, encontramos una “pala” de gamo que, como debe ser, se la dimos a los dueños al regreso del paseo.

Bajo el Cerro Alcor - o Alcojona- se encuentra La Nava antes llamada Nava de San Luis. Las moscas (si vas en verano puede ser que vuestro olor corporal atraiga a estos dipteros, debemos usar un repelente específico antimoscas porque pueden ser muy insistentes y pesadas) y las mariposas (como la hermosa Pandora y la disimulada Hipaparchia semele) son muy abundantes,


se ven cabras también en las cercanías de la finca. Las raíces de pinsapo, como las de alcornoque se agarran al suelo arcilloso del bosque de alcornoques impidiendo que los torrentes lo arrastren a las profundidades de las dolinas del llano a través de los sumideros.

El ciruelo silvestre muestra sus grandes frutos que algunos prefieren a los pequeños endrinos para producir su propio pacharán. En el bullicio silencioso del bosque se hace un silencio total, tanto que hasta las moscas parecen quietas, pasa en vuelo rápido sobre el “aguaero” donde esperamos que los pequeños pájaros entren, recortando troncos de pinsapo, un Gavilán. Como diría un antiguo y desaparecido amigo “por esto sólo ha compensado echar el día”.


Hermosos y pequeños pinsapos crecen por todas partes, hasta en las grietas de las rocas, a veces con troncos solitarios, otras en forma bífida, triple o cuatrupe y hasta cinco troncos juntos que nunca sabré si es uno solo que se divide desde el suelo o son cinco árboles diferentes.

Imagina que todos te miran con curiosidad desde los pequeños -pidiéndote que no los pises-, hasta los grandes que lo harán con poderío y curiosidad.


Yo los miro con admiración, como a los alcornoques y a los demás miembros de esta ciudad-bosque. Nunca sabré si los escasos pinsapos que crecen, lentos y débiles, son pequeños que esperan con paciencia a que alguno de los gigantes muera para que le llegue la luz y la energía contenida en los restos putrefactos del gigante derribado o son errores cometidos por los gigantes al dejarlos vivir bajo su protección, tal vez sea, simplemente, el ciclo de vida y muerte, muerte y vida, que, además es único: morir para que otros vivan sobre los cadáveres de los muertos.


¡ Que poco hemos aprendido los humanos de los verdaderos sabios de la vida: los árboles¡.


Nos despedimos de la familia.


Hablo con Clara, hija mayor de los dueños, vive la finca como sus padres le han enseñado, sintiéndola como uno más de la familia, con el cariño que da considerar la finca como un hermano, con sus dotes naturales de observación y su formación científica, me explica la posible razón de la existencia de pinsapos “de color azul y otros de color verde oscuro”, pero eso lo dejamos para otro paseo. Como dice Paqui, “La Nava me acuna”.

Paisaje de tarde de verano en jardín.

Andrés Rodríguez González Julio 19th, 2017

Paisaje de tarde de verano en jardín
Paisaje es vida, actividad, cambios y también muerte.

Los nervios eran evidentes en el albaricoquero del vecino que sirve de sombra a mis gallinas. Las currucas que pasan parte del día esperando a que maduren las moras para comerlas de cena, no han parado durante la tarde de chasquear con su sonido de alarma que abulta más que el volumen del pequeño pájaro.
Los gorriones en un continuo ir y venir de un árbol a otro, desde el membrillo al albaricoque, desde al azufaifo al pinsapo y al olivar vecino. En medio de sonidos de alarma continuos y pequeños vuelos aparentemente sin rumbo que provocaban que otros gorriones se sumaran a la actividad frenética.
Las tórtolas turcas, animales simples y tontorrones (al menos para mí) vigilaban de lejos encaramadas en la parte más alta del ciprés.
Y los abejarucos, que habitualmente a estas horas utilizan las zonas a la sombra para capturar insectos voladores y las abejas que regresan a sus colmenas, vuelan más altos que días pasados.
Hasta las gallinas, cacareaban sin poner huevos y se mostraban nerviosas e irritadas.
Mientras, el pinsapo aparentemente ajeno a lo que está pasando el jardín, ¿Hace la señal de victoria con dos piñas? No, simplemente han crecido así por capricho. Y los caprichosos colores de los gladiolos afloran a sus pies ignorantes de que el pinsapo no quiere adornos.

En la Naturaleza nada ocurre por capricho, todo tiene su por qué. En este caso, después de permanecer un largo rato bajo las ramas del albaricoque, descubrí las razones del nerviosismo general. Una culebra de escalera de pequeño tamaño se movía lenta pero decidida entre las ramas buscando algún pollo de gorrión despistado para engullirlo.
Al contrario puede ocurrir en la especie humana, que no todo tiene que tener un por qué, a veces se hacen cosas por capricho, sin que tengan una justificación clara.
Preguntaban al director de cine Carlos Saura sobre las razones psicológicas de la presencia de “patas de gallo” en la nevera de su película “CRÍA CUERVOS” cuando la estrenó. Los periodistas, quizás influidos por la moda de la psicología argentina, entonces muy valorada, trataban de indagar en traumas de la infancia del director, en sus represiones sexuales y hasta en posibles instintos agresivos. Recuerdo la respuesta cortante, escueta y malhumorada de Carlos Saura ante el bombardeo psicológico de los periodistas:
-    He puesto las patas de gallo en la nevera por que recordaba que en mi niñez siempre teníamos algunas en casa para hacer caldos. Ah y porqué me da la gana.
¿Será una característica de los humanos tener que sacar conclusiones de todo? ¿Ó es que eso nos hace más inteligentes a nuestros propios ojos? ¿Ó es que somos así de complicados?.

PAISAJES DE LA SERRANIA DE RONDA: Cortijo de El Palancar

Andrés Rodríguez González Julio 12th, 2017

PAISAJES DE LA SERRANIA DE RONDA.
Cortijo de El Palancar

Uno de los últimos cortijos activos de la Serranía de Ronda, se encuentra actualmente abandonado y, poco a poco, se va notando que el paso del tiempo ocasiona su paulatino deterioro, así,  parte de la techumbre se ha caído y el horno situado en la misma puerta tiene grandes grietas que indican su inminente ruina.
Cuentan que cuando el bandolero Pasos Largos estaba perseguido por la guardia civil se refugió una noche en El Palancar, concretamente en el pajar del cortijo; también allí estaba pasando la noche una pareja de civiles, avisados los cortijeros con una seña ya convenida entre ellos y el bandolero de su presencia, le comunicaron que la guardia civil estaba en el cortijo y le invitaron a marcharse por su propia seguridad, el bandolero no hizo caso a las recomendaciones de los cortijeros y pasó la noche en el pajar del cortijo, pared con pared con sus perseguidores, con buen criterio pensó que en el cortijo tenía la máxima seguridad y que nunca lo buscarían. Como así fue.

Next »