Archive for Junio, 2016

Pilares, Fuentes y Albercas de la Serranía de Ronda. Pilar de La Añoreta

Andrés Rodríguez González Junio 28th, 2016

Pilares, Fuentes y Albercas de la Serranía de Ronda
Con Juan Castaño.

Pilar  de La Añoreta

Situado en   LATITUD:   36°47’43.94”N     LONGITUD: 4°59’28.69”O. Muy cerca del Boquete de Roque en el antiguo camino que comunicaba Ronda con El Burgo por el Puerto del Viento y Los Empedraos. A su lado se encuentra las ruinas de la antigua Venta de La Añoreta, con unos corralones que dan buena idea de la importancia que estos lugares tuvieron en otros tiempos en los desplazamientos de ganado y personas.
La fuente y pozo de La Añoreta, suministra frías y abundantes aguas al caminante. Un lugar ideal para un descanso si hacemos el tramo de camino entre el Puerto del Viento y El Burgo o entre el Arroyo de La Ventilla y El Burgo por Los Aguilares. A partir del Boquete de Roque se inicia un precioso camino en descenso hasta El Burgo por el viejo camino que aqu, está magníficamente conservado.

Plantas de la Serranía de Ronda. Azufaifo

Andrés Rodríguez González Junio 28th, 2016

Azufaifo. Jinjolero.
Su nombre científico es Zizyphus jujuba.
Es un arbolito de pequeño tamaño originario de China pero cultivado en las zonas templadas del Mediterráneo desde los tiempos de los romanos.
Plinio relata que fue introducido en Roma desde Siria en tiempos de Augusto. El origen del nombre es muy curioso, mientras que el nombre vulgar “Azufaifo” parece ser de raíces árabes, el científico del género “Zizyphus”, lo relacionan con una derivación griega del nombre oriental “Asafifa”. Según Desfontaines este árbol y no el Almez es el verdadero Lotos de los antiguos, que dio origen a los Lotógagos, un pueblo del norte de África.
Pertenece a la familia Rhamnaceas, plantas leñosas de tipo arbustivo, con pinchos, a veces trepadoras, sus flores son muy pequeñas y los frutos en forma de “Drupa”. De esta familia son también otras plantas abundantes en la Serranía como el Espino Negro y el Sanguino. Algunas son medicinales, otras se han usado industrialmente.
Del mismo género y muy relacionado con el Azufaifo está el “Arto” propio de zonas semidesérticas Mediterráneas, en España, de forma natural, se da en zonas cálidas de Almería y Murcia, se distingue bien, el Arto es más pinchudo y su fruto es menos sabroso que el Azufaifo. En estas provincias se suele injertar el Azufaifo sobre pies de Arto resultando una planta vigorosa y de frutos muy apreciados.
En la Serranía el Azufaifo es frecuente encontrarlo en las antiguas huertas, a veces asilvestrado en riberas de arroyos y acequias, como continuamente salen brotes de su base no es planta que se pierda fácilmente. Se reproduce con facilidad a partir de esos renuevos, se consiguen ejemplares nuevos ya que la semilla es muy difícil que germine, lo usual en la Serranía era sacar los arbolitos futuros de esos pequeños brotes.
Los frutos son ricos en mucílago, por lo tanto tienen propiedades laxantes y se han usado también como pectorales. Maduran al final del verano, pasan de un color verde claro a un intenso rojo, son de pequeño tamaño, la semilla está situada centralmente.

Se usa frecuentemente como planta de jardín por sus hojas de intenso color verde y la presencia de los pequeños frutos, de muy agradable sabor. Es de hoja caduca, perdiéndola con los primeros fríos del otoño.
Existen unos magníficos ejemplares en algunos jardines por la zona de la carretera de Campillos. También en zonas donde haya habido huertas.

Es una de esas plantas que ya no está de moda como la higuera. Antiguamente toda casa de campo con huerta tenía uno o varios Azufaifos. Una lástima que se pierdan estás plantas que forman parte de nuestra historia.
A raíz de publicar en octubre de 2.008 una entrada sobre el Azufaifo recibi un comentario de Pedro Granado que me comunicaba que aunque el azufaifo parece relegarse históricamente al sur y sureste de la Península, más Levante y Cataluña, existe aislado desde hace siglos en el corazón de las dos Castillas concretamente en el Valle del Tiétar, en la cara sur de Gredos. En esta zona, principalmente en el pueblo de Pedro Bernardo (Ávila), existe desde hace siglos, y su fruto se consume típicamente en las fiestas del Santísismo Cristo dela Vera Cruz, a medidados de septiembre. Se pueden observar varios árboles de azufaifo de hasta 10 metros de altura, y troncos cuyo diámetro puede llegar a los 70 cm. de diámetro, con lo que podemos hacernos una idea de la antigüedad de estos, teniendo en cuenta el lentísimo crecimiento de su madera. Los más antíguos han sobrevivido gracias a que estaban en huertas del casco urbano, detrás de las casas, y no han sucumbido a incendios, talas ni abandonos. A la gente le resulta curioso que el azufaifo se dé tan bien en esta zona, al sur de la Sierra abulense de Gredos, pero lo cierto es que hay que acercarse hasta aquí para vé el azufaifo creciendo entre castaños, robles y avellanos y constatar su altísima capacidad de adaptación al clima, que en esta zona castiga en invierno con generosos abundantes.

Bibliografía.
Guía del Incafo de los Árboles y arbustos de la Península Ibérica. Gines López González.  886 páginas. Madrid 1982

Un árbol singular de la Serranía de Ronda: El torvisco Macho del Mures.

Andrés Rodríguez González Junio 21st, 2016

Situado en el Cerro Mures, una montaña caliza situada cerca de Ronda que posee excelentes vistas sobre la ciudad, Acinipo, las montañas de Grazalema y de Montejaque, Sierra Hidalga. Existen en las cercanías algunos hermosos ejemplares de Cornicabra de porte arbóreo, pero este árbol en concreto es un híbrido de Torvisco y Cornicabra, que, además presenta un tamaño descomunal para tratarse de estos matorrales.

Araña Napoleón sobre Rapónchigo

Andrés Rodríguez González Junio 12th, 2016

Araña Napoleón sobre Rapónchigo
La relación que mantiene la araña cangrejo con la planta Campanula llamada Papónchigo se puede considerar como un caso de “Comensalismo”.
En biología se le denomina comensalismo, a las relaciones o interacciones que existen entre dos individuos de distinta especie, en la que uno es beneficiado sin perjudicar ni beneficiar al otro. Este tipo de relación es común en muchas especies animales del planeta e incluso en plantas y es utilizado para asegurar la supervivencia de algunas especies principalmente aquellas que son muy pequeñas, muy débiles o ser susceptibles de ser atacadas, otro de los beneficios que se obtiene se le denomina “tróficos” estos se relacionan con la obtención de comida, así como los beneficios de transporte que suelen existir.
La palabra “comensalismo” viene del latín “com mensa” que significa compartiendo mesa, por lo que tienen una connotación alimentaria, que deja entre ver una de las principales consecuencias de este comportamiento. El comensalismo es una relación entre dos individuos, en la que uno saca provecho del otro organismo sin que este se vea afectado o beneficiado.
La Araña Napoleón,  Synema globosum, pertenece a la familia Thomisidae  (Tomisidos, popularmente arañas cangrejo).
Es característico el dibujo negro que presenta en su abdomen que le da el nombre popular por ser parecido a la silueta de Napoleón, aunque hay que echar imaginación para verlo. Podemos encontrar cierta simulitud con el sombrero de dos puntas que Napoleón empleaba. Alrededor de la silueta negra, los ejemplares de Synema globosum pueden presentar un color rojo anaranjado, amarillo o blanco.
Como ocurre con la mayoría de las especies de arácnidos, las hembras son más grandes que los machos. En el caso de Synema globosum, la hembra mide unos 8 mm, frente a los 2 o a lo sumo 4 mm de los machos.
La araña Napoleón caza situándose encima de las flores o escondida en la parte inferior de las mismas. Abre sus robustas patas delanteras como un cangrejo y espera que algún despistado insecto se pose en la flor para lanzarse sobre el mismo y propinarle un venenoso mordisco con sus quelíceros. El veneno de Synema globosum  es muy potente y llega a matar insectos mucho más grandes que ella, como abejas o moscas de gran tamaño. No necesita seda, ni hace trampas para la captura de sus presas, le bastan sus patas y su veneno.
Es una especie común en la Península Ibérica.

La planta de la foto es conocida popularmente como Rapónchigo.  De nombre científico Campanula rapunculus . Pertenece a la familia Campanuláceas (campanulas). Una planta ampliamente distribuida por toda la península, aunque se hace más escasa en Levante. Se puede encontrar en bosques, prados, setos, cunetas y lugares de cierta humedad.
Florece entre abril y julio
Hierba bienal, de hasta 80 cm ., cubierta de pelos, con raíz carnosa y fusiforme. Las hojas inferiores son oblongas con un corto pecíolo y tienen el margen más o menos ondulado. Las flores, de color azul, se disponen en gran número en largos racimos.
El nombre campanula quiere decir en latín pequeña campana, campanilla, y hace referencia a la forma de la corola. La raíz de esta especie es comestible y posee un ligero sabor a nueces, y puede comerse tanto cruda como cocida. En algunos lugares se comen también sus hojas en ensalada.

La fotografía es de José María Canca

Bibliografia
guadarramistas.com
www.internatura.org

FAUNA DE LA SERRANÍA DE RONDA La rata negra.

Andrés Rodríguez González Junio 10th, 2016

FAUNA DE LA SERRANÍA DE RONDA
La rata negra. Rattus rattus.  
También conocida como rata de barco, rata del tejado, rata común, pericote.
Entre los mamíferos roedores que viven en las cercanías o con los humanos destacan tres, el ratón común, la rata negra y la rata gris. A nadie le gusta tener ratas cerca pero puestos a elegir es preferible una gris a una negra, entre otras cosas porque la negra fue responsable de trasmitir las epidemias de “peste bubónica” que asolaron Europa siglos atrás y fueron responsables de grandes mortandades.
Se diferencian más que por el color porque la negra tiene la cola más larga que el cuerpo al contrario que la gris,  la gris es algo menor y no trepa nunca a los árboles, mientras que la negra lo hace con suma facilidad.
Esta especie es originaria de Asia tropical, pero colonizó Europa en el siglo VIII, y desde allí se dispersó por el resto del mundo, adaptándose a casi todos los hábitats, aunque predomina en los ambientes cálidos.
Está incluida en la lista de las 100 de las especies exóticas invasoras más dañinas del mundo, confeccionada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.
Su cuerpo mide de 16 a 22 cm de longitud, y la cola, sin pelos y cubierta de escamas en anillo, de 17 a 24 cm. Su peso es de entre 150 y 230 g. El hocico tiene forma de punta. El manto es negro o gris. Viven de 2 a 3 años.
Se encuentra en los asentamientos humanos y prefiere vivir bajo techo. A diferencia de la rata gris (Rattus norvegicus) es especialista en trepar. Las hembras tienen 5 o 6 camadas al año; el tiempo de gestación es de 21 a 30 días y paren cada vez de 5 a 8 crías, que al nacer son ciegas y sin pelo.
Ocasiona problemas económicos y sanitarios. Además de consumir o dañar los alimentos, la rata ha estado asociada a muchas enfermedades como la peste bubónica, transmitida por la pulga que la parasita.
Y “como hay gente para todo” las ratas negras a veces son mantenidas como mascota. Sin embargo, la mayoría de las ratas de compañía son ejemplares domesticados de rata gris Rattus norvegicus.

El ejemplar que se presenta en la fotografía apareció, sin duda envenenado con raticida) en un jardín.
Bibliografía
Wikipedia

Paisaje de la Serranía: Tavizna.

Andrés Rodríguez González Junio 10th, 2016

Cerro Tavizna.
A la derecha de este impresionante cerro, en la parte baja debería estar el Embalse de Los Caballeros o de Montejaque, pero sólo acumula agua en periodos de máxima y continuada lluvia. Al fondo con el peñacho de nubes el Hacho de Montejaque.
El cerro Tavizna, de 903 m de altitud se encuentra en el término municipal de Montejaque. Geológicamente pertenece a la serie carbonatada de edad Jurásica, con una estructura anticlinal de flancos verticales.

La cubierta vegetal es escasa, predominando el matorral mediterráneo.

En cuanto a fauna se pueden ver algunas aves como halcón peregrino, búho real y cernícalo; con mamíferos tan interesantes como el gato montés. Hasta hace pocos años albergaba una pareja de Alimoches.

Presenta un extraordinario valor paisajístico, espeleológico por la presencia a sus piés del complejo Hundidero-Gato y arqueológico gracias a las pinturas rupestres paleolíticas, materiales cerámicos, líticos y óseos del Neolítico Final-Calcolítico encontradas en la cueva de Hundidero. Además del interés antropológico que presenta el Embalse de Los Caballeros.

FAUNA DE LA SERRANIA DE RONDA. Caballito del Diablo de alas negras

Andrés Rodríguez González Junio 10th, 2016

FAUNA DE LA SERRANIA DE RONDA.
Caballito del Diablo de alas negras. Calopterix haemorrhoidalis.
Dentro del grupo de insectos llamados Odonatos tenemos dos grandes subgrupos, las libélulas y los caballitos del diablo.
Ambos tienen dos pares de alas, las delanteras y traseras. En los caballitos del diablo, las alas son similares en tamaño y forma, aunque las alas posteriores son un poco más cortas en algunas especies. Las alas posteriores de las libélulas son más amplias y tienen una forma diferente a las alas anteriores.
Las alas de un odonato están apoyadas sobre fuertes músculos que las convierten en ágiles voladoras, capaces de recorrer largas distancias e incluso migrar a otros lugares. Los caballitos del diablo son voladores mucho más débiles.
Dentro de los caballitos del diablo, la familia Calopterygidae se distingue por la bonita y llamativa coloración de ahí la etimología del nombre, kalós  pterón: alas bellas.
El caballito del diablo de alas negras posee un tamaño mediano, entorno a los 50 mm y una envergadura alar superior a los 60 mm.  En la cabeza poseen un par de ojos globosos, laterales y bastante separados.
La característica que mejor identifica a la especie es la presencia de un color negro en las alas de los machos, mientras las hembras sólo presentan esta coloración más intensa en el ápice de las alas posteriores, siendo un tono ahumado el dominante. Los machos maduros presentan una coloración roja-rosada en la parte inferior de los últimos tres segmentos, causa del nombre de la especie. El Pterostigma (celdilla opaca y densa cercana al ápice del ala) está ausente en los machos, mientras en las hembras presenta color blanco. Existe una bien marcada diferencia sexual entre machos y hembras, es lo que se llama dimorfismo sexual.
Los individuos inmaduros presentan colores verdes, anaranjados y con brillos metálicos. Otra particularidad que presentan es la tonalidad cobriza de las tibias.
Se puede encontrar por toda la zona mediterránea occidental
Es una especie que necesita para vivir un agua con calidad. Siempre en ríos  y arroyos de poca profundidad pero con corriente de agua durante todo el año. Prefiere orillas con abundante vegetación y bien soleadas. A veces vive en canales y acequias de riego.
La actividad de los adultos comienza durante la segunda quincena de Marzo y termina a principios de Noviembre. Los machos maduros son fuertemente territoriales, por lo que tienden a permanecer en área muy restringida del curso de agua, por  lo que conforme avanza la temporada, los machos inmaduros se ven obligados a migrar río arriba buscando su propio territorio.

La defensa de este territorio tiene como objetivo permitir que sólo pongan huevos  las hembras que han copulado con el macho “propietario” del territorio. Cuando hay una alta densidad de machos, algunos de ellos muestran un carácter no territorial, vagando a todo lo largo del curso de agua, pero con escaso éxito reproductivo.
Las hembras y machos alcanzan su estado maduro a los 9 días de la eclosión, teniendo en cuenta que la vida media de un adulto es de sólo 10-16 días, tenemos que la vida media de una adulto maduro es de tan sólo 1-7 días. No obstante, la duración de la cópula es breve, de unos 2,5 minutos y un macho puede fecundar a varias hembras en una sola hora.
Curiosamente, esta especie posee dos estrategias muy perfeccionadas para asegurar que la descendencia lleve los genes del macho que ha copulado en último lugar. Las hembras almacenan el esperma en una bolsa copuladora y en dos órganos llamados espermatecas, ubicados en el abdomen. Cuando los machos se aparean vacían de esperma de la bolsa, atrapándolo con una serie de espinas que poseen en el órgano copulador, llamado edeago. A veces las espermatecas son más estrechas que el edeago, por lo que el macho no puede extraer directamente el esperma. Sin embargo el macho puede usar el edeago de una forma diferente: estimula a la hembra de la misma manera que lo haría un huevo en el momento de la puesta, induciendo de esta forma la expulsión del esperma de las espermatecas.
La fase de huevo transcurre durante el verano, hay ninfas pequeñas en otoño y principio del invierno, las ninfas comienzan a alcanzar el último estado a partir de Abril, y son observables los primeros signos metamórficos a principios de Mayo el periodo principal de emergencia de adultos tiene lugar desde finales de Mayo hasta mitad de Septiembre. Los registros máximos de presencia de adultos corresponden al periodo que va desde final de Julio a final de Agosto. Algunos individuos de la población parecen necesitar dos años para completar su ciclo, y podrían emerger en una época más temprana que el resto de ninfas, en relación con esto último parecen estar las observaciones de adultos realizadas a mitad de Mayo.

Bibliografia
www.granadanatural.com
www.ehowenespanol.com

PLANTAS DE LA SERRANÍA DE RONDA Roble Melojo, rebollo.

Andrés Rodríguez González Junio 5th, 2016

PLANTAS DE LA SERRANÍA DE RONDA
Roble Melojo, rebollo.
Quercus pyrenaica

Árbol caducifolio de hasta 25 m de altura, con follaje de color verde claro en verano y pardo en el invierno. Es fácil de distinguir por su tonalidad y sobre todo por las hojas. Suele estar mezclado con encinas en las partes más bajas de su distribución y con pinares o matorrales de alta montaña en la parte superior de las montañas ibéricas donde habita. Cuando llega el otoño su típico color de primavera y verano, se torna pardo amarillento.
Las hojas son caducas, grandes, con lóbulos profundos cuyas incisiones en muchos ejemplares casi alcanzan el nervio central. Son pelosas por ambas caras, aunque se aprecia mejor este carácter por el envés, que muestra un tono verde más claro; esto es importante para diferenciar esta especie de los verdaderos robles. Cuando comienzan a brotar, muestran un tono algo rosado que cambia bruscamente al verde claro, y llegado el otoño se tornan pardo-amarillentas al secarse.
En las ramas es posible encontrar unas agallas muy características, provocadas por la picadura de una pequeña avispa, que pone sus huevecillos en los tejidos de la rama. Dichas agallas son de aspecto globoso y color pardo, con unos piquitos a modo de corona en la parte superior y, sobre todo en las que se encuentran en el suelo, un pequeño agujerito por donde ha surgido el individuo adulto derivado de la larva que se había alimentado de la agalla. Las agallas son mecanismos de defensa de la planta ante el ataque del insecto.

El rebollo es de los más extendidos representantes del género en la flora ibérica, ya que en nuestro territorio se encuentra el máximo de su distribución. Se extiende por las montañas que bordean la meseta del Duero, es decir, Cordillera Cantábrica, Sistema Central, Sistema Ibérico y las montañas del NE de Portugal. Además se encuentra en algunas zonas de Montes de Toledo, Sierra Morena y algunas sierras béticas, como Sierra Nevada. Fuera de la Península aparece en el sudoeste de Francia y en Marruecos, cubriendo además un amplio margen de altitudes, desde cerca del nivel del mar hasta más de 1700 m.
En la Serranía de Ronda son poco abundantes, probablemente por haber sido talados, en la Sierra de Las Nieves tan solo se conservan dos árboles en el Puerto del Robledal, cerca de la Fuenfría. El nombre del lugar, Puerto del Robledal, sin duda hace referencia a la presencia de estos árboles en número elevado, pero, tal vez por el pastoreo excesivo, quizás para obtención de madera, vigas para apuntalar galerías de minas, por incendios forestales o por todas esas causas a la vez está casi desaparecido. Aunque hace pocos años se ha realizado una repoblación importante en la zona. También existen en poca cantidad en Sierra Bermeja  y en los picos de Los Alcornocales como el Aljibe. (Gracias Carlos Guerrero Barragan por la información)
Curiosamente, a pesar del epíteto específico “pyrenaica” que indicaría su presencia en esta cordillera, realmente solo se encuentra en algunos puntos del Pirineo navarro. Ecológicamente desempeña un papel intermedio entre las especies más claramente xerófitas (encinas y quejigos) y los verdaderos robles. Se desarrolla principalmente sobre suelos silíceos (granitos, gneises, pizarras), muy raramente en calizas; deben ser húmedos, aunque en menor medida que para los robles por antonomasia. Soporta climas continentales, con fuertes heladas en invierno y un cierto grado de sequía veraniega, entre algo menos de 400 y hasta casi 2000 m como altitudes extremas. Puede formar masas puras (melojares o rebollares, localmente extensos en las montañas castellanas o en el Sistema Central) en que se encuentran arbustos como genistas o piornos y plantas herbáceas como las peonías o el helecho común. Puede también mezclarse con la encina y el quejigo en las altitudes inferiores, con el haya en las zonas más húmedas o con pinos de montaña a mayores altitudes.

Aunque las bellotas se pueden aprovechar para montanera, la producción es baja e irregular en comparación con la de la encina o el alcornoque.
La madera, muy fibrosa y de difícil secado, se ha empleado para hacer vigas, traviesas de tren y en minería. Se ha utilizado sobre todo para la producción de leña y carbón vegetal.

Bibliografía
http://www.arbolesibericos.es/

FAUNA DE LA SERRANIA DE RONDA Sapo corredor Epidalea calamita

Andrés Rodríguez González Junio 3rd, 2016

FAUNA DE LA SERRANIA DE RONDA
Sapo corredor Epidalea calamita
Anfibio de mediana talla, pero con oscilación de tamaño que puede ir desde los 31,3 - 71 mm en machos a 38,8 - 98 mm en hembras.
Se puede describir como un animal de aspecto robusto y de extremidades relativamente cortas, tiene la cabeza más ancha que larga y el hocico corto y redondeado. Las glándulas parótidas son grandes, dispuestas a continuación de unos ojos prominentes con pupila horizontal e iris amarillo metálico con vetas negras. El tímpano apenas se aprecia y mide la mitad del diámetro del ojo. Los dedos son cortos, con tubérculos subarticulares pares y dos tubérculos palmares. La piel dorsal es muy verrugosa, con las verrugas de tamaños muy dispares y dispuestas irregularmente, a menudo de color rojizo especialmente en las hembras. La coloración dorsal es muy variable, pero generalmente verde grisáceo a marrón, alternada con manchas más claras de distinto tamaño, que pueden presentarse bien definidas o difusas. Una característica línea media dorsal amarilla clara suele recorrer longitudinalmente el cuerpo desde la base de los ojos hasta la cloaca, pero esta línea puede estar ausente. La región ventral es de color crema y de aspecto granulado, especialmente en las patas traseras.
Categoría global de conservación para la IUCN en 2006, como “Preocupación menor”. Igual catalogación para España.
Esta especie está ampliamente distribuida en Europa desde la Península Ibérica hasta Bielorrusia y el oeste de Ucrania. Está presente en el Reino Unido y el suroeste de Irlanda, llegando al sur de Suecia, mientras que el borde sur llega a pies de los Alpes y el norte de Austria y Eslovaquia. Presente en la mayor parte de la Península, y en todas las provincias españolas, no se conoce su distribución en la zona cantábrica ni en algunas áreas del interior. Puede ocupar multitud de hábitats, desde zonas costeras o zonas áridas hasta zonas húmedas y montañosas hasta por encima de los 2.500 m de altitud. También vive en áreas con fuerte influencia humana como cultivos y graveras.

El período reproductor no es continuo y está muy asociado con los episodios de lluvia, pero existe variación latitudinal y altitudinal en la fenología reproductiva de esta especie. Tras episodios de lluvia, los machos acuden a las charcas con rapidez y en un par de días pueden formarse grandes coros de machos cantando. Los coros alcanzan el pico de actividad de 2 a 3 horas tras la puesta de sol y se alargan hasta 2 – 3 horas antes de amanecer, en función de las condiciones ambientales. Los machos cantan desde la orilla o en zonas someras, en postura erguida. El canto es recuerda al de un grillo pero más prolongado. En el sur peninsular, las primeras puestas pueden encontrarse a continuación de las primeras lluvias de otoño, o al comienzo del invierno, frecuentemente con un pico de reproducción entre enero y comienzos de marzo. Con el incremento en latitud o altitud la fecha de puesta se retrasa hasta bien entrada la primavera o incluso al comienzo del verano. Los machos defienden territorios a base de cantos durante la reproducción, el área defendida es mayor cuanto mayor tamaño tiene el macho. Es frecuente observar peleas entre machos, y la incidencia de éstas depende de la razón de sexos operativa. Algunos machos jóvenes adoptan estrategia de permanecer en silencio junto a machos cantando e intentando así obtener copulas con las hembras que se aproximen atraídas por el canto.
Su reducido periodo larvario le permite explotar charcas temporales someras de muy distinto tamaño, desde grandes praderas de inundación hasta cuerpos de agua efímeros formados en las cunetas de los caminos. Cría preferentemente en cuerpos de agua dulce pero soporta condiciones salobres. Las larvas toleran también un amplio rango de temperaturas  entre los 6 a 43 ˚C  y de amplio margen para el pH  de 5 a 9.
Los adultos son carnívoros y se alimentan de fundamentalmente de artrópodos como hormigas, escarabajos, larvas de varios insectos, saltamontes, ciempies y escorpiones. Los renacuajos son predominantemente herbívoros, comiendo algas y detritos, con escasa presencia de plantas en su dieta. No obstante, los renacuajos pueden comerse a otros renacuajos muertos, tanto de su especie como de otras especies.
En su fase embrionaria y larvaria sufren depredación tanto por vertebrados como por invertebrados acuáticos, principalmente escarabajos, larvas de libélula y otros anfibios. Ocasionalmente otros vertebrados como culebras de agua, aves y galápagos pueden depredar activamente sobre estos renacuajos. La gelatina que envuelve a los huevos puede constituir una barrera protectora eficaz frente a algunos depredadores invertebrados.
El Sapo corredor sufre la competencia con Bufo bufo y Rana temporaria.

Bibliografia
www.vertebradosibericos.org/

PAISAJES DE LA SERRANIA DE RONDA CERRO ABANTO

Andrés Rodríguez González Junio 2nd, 2016

PAISAJES DE LA SERRANIA DE RONDA
CERRO ABANTO
El Cerro Abanto, en el Parque Natural Sierra de Las Nieves tiene una altitud de 1.508 m sobre el nivel del mar. El nombre hace referencia al color rojizo de las rocas que lo forman. Separado del Cerro Alcor o Alcojona por el Puerto Capuchino, presenta una estructura bastante diferente, el Abanto es de rocas peridotitas mientras el Alcojona es de calizas. Las primeras son de origen Magmático mientras que las calizas son Sedimentarias. Eso da una estructura de suelo tal que hace que la vegetación y el perfil montañoso sea bastante distinto.
Sus laderas asoladas y con pinares aún en regeneración son una muestra del terrible incendio que en 1.991 asoló estas sierras.
La foto está tomada desde el Cerro del Robledal, se puede ver en primer término a la izquierda, abajo, el Puerto del Robledal, el camino que cruza toda la imagen de izquierda a derecha es el Cordel de Los Pescaeros que se dirige a la Costa del Sol y al Castaño Santo y el que parte perpendicular al anterior que se presenta menos marcado, va hacia el Cerro Alcojona, de color gris claro y más agreste.
Para andar por estos lugares se debe tener en cuenta en época estival la continua exposición al sol y la falta de agua en todo el Cerro Abanto. Con nieve hay que extremar las precauciones por la formación de placas de hielo en algunos lugares.
El Cerro Abanto y el Alcojona constituyen una divisoria de agua muy nítida, las aguas que discurren hacia la izquierda de la foto van hacia los arroyos de Carboneras y de La Fuenfría, cabeceras del río Guadalevín, afluente del río Guadiaro, mientras que a la derecha (parte de atrás del Alcojona y del Abanto forman el Cambuyón de Vélez y el arroyo de los Caballos que son las cabeceras de Río Verde, las aguas que vierten en la parte frontal de la foto forman las cabeceras del río Guadaiza.

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