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FAUNA DE LA SERRANIA DE RONDA. Caballito del Diablo de alas negras

Andrés Rodríguez González Junio 10th, 2016

FAUNA DE LA SERRANIA DE RONDA.
Caballito del Diablo de alas negras. Calopterix haemorrhoidalis.
Dentro del grupo de insectos llamados Odonatos tenemos dos grandes subgrupos, las libélulas y los caballitos del diablo.
Ambos tienen dos pares de alas, las delanteras y traseras. En los caballitos del diablo, las alas son similares en tamaño y forma, aunque las alas posteriores son un poco más cortas en algunas especies. Las alas posteriores de las libélulas son más amplias y tienen una forma diferente a las alas anteriores.
Las alas de un odonato están apoyadas sobre fuertes músculos que las convierten en ágiles voladoras, capaces de recorrer largas distancias e incluso migrar a otros lugares. Los caballitos del diablo son voladores mucho más débiles.
Dentro de los caballitos del diablo, la familia Calopterygidae se distingue por la bonita y llamativa coloración de ahí la etimología del nombre, kalós  pterón: alas bellas.
El caballito del diablo de alas negras posee un tamaño mediano, entorno a los 50 mm y una envergadura alar superior a los 60 mm.  En la cabeza poseen un par de ojos globosos, laterales y bastante separados.
La característica que mejor identifica a la especie es la presencia de un color negro en las alas de los machos, mientras las hembras sólo presentan esta coloración más intensa en el ápice de las alas posteriores, siendo un tono ahumado el dominante. Los machos maduros presentan una coloración roja-rosada en la parte inferior de los últimos tres segmentos, causa del nombre de la especie. El Pterostigma (celdilla opaca y densa cercana al ápice del ala) está ausente en los machos, mientras en las hembras presenta color blanco. Existe una bien marcada diferencia sexual entre machos y hembras, es lo que se llama dimorfismo sexual.
Los individuos inmaduros presentan colores verdes, anaranjados y con brillos metálicos. Otra particularidad que presentan es la tonalidad cobriza de las tibias.
Se puede encontrar por toda la zona mediterránea occidental
Es una especie que necesita para vivir un agua con calidad. Siempre en ríos  y arroyos de poca profundidad pero con corriente de agua durante todo el año. Prefiere orillas con abundante vegetación y bien soleadas. A veces vive en canales y acequias de riego.
La actividad de los adultos comienza durante la segunda quincena de Marzo y termina a principios de Noviembre. Los machos maduros son fuertemente territoriales, por lo que tienden a permanecer en área muy restringida del curso de agua, por  lo que conforme avanza la temporada, los machos inmaduros se ven obligados a migrar río arriba buscando su propio territorio.

La defensa de este territorio tiene como objetivo permitir que sólo pongan huevos  las hembras que han copulado con el macho “propietario” del territorio. Cuando hay una alta densidad de machos, algunos de ellos muestran un carácter no territorial, vagando a todo lo largo del curso de agua, pero con escaso éxito reproductivo.
Las hembras y machos alcanzan su estado maduro a los 9 días de la eclosión, teniendo en cuenta que la vida media de un adulto es de sólo 10-16 días, tenemos que la vida media de una adulto maduro es de tan sólo 1-7 días. No obstante, la duración de la cópula es breve, de unos 2,5 minutos y un macho puede fecundar a varias hembras en una sola hora.
Curiosamente, esta especie posee dos estrategias muy perfeccionadas para asegurar que la descendencia lleve los genes del macho que ha copulado en último lugar. Las hembras almacenan el esperma en una bolsa copuladora y en dos órganos llamados espermatecas, ubicados en el abdomen. Cuando los machos se aparean vacían de esperma de la bolsa, atrapándolo con una serie de espinas que poseen en el órgano copulador, llamado edeago. A veces las espermatecas son más estrechas que el edeago, por lo que el macho no puede extraer directamente el esperma. Sin embargo el macho puede usar el edeago de una forma diferente: estimula a la hembra de la misma manera que lo haría un huevo en el momento de la puesta, induciendo de esta forma la expulsión del esperma de las espermatecas.
La fase de huevo transcurre durante el verano, hay ninfas pequeñas en otoño y principio del invierno, las ninfas comienzan a alcanzar el último estado a partir de Abril, y son observables los primeros signos metamórficos a principios de Mayo el periodo principal de emergencia de adultos tiene lugar desde finales de Mayo hasta mitad de Septiembre. Los registros máximos de presencia de adultos corresponden al periodo que va desde final de Julio a final de Agosto. Algunos individuos de la población parecen necesitar dos años para completar su ciclo, y podrían emerger en una época más temprana que el resto de ninfas, en relación con esto último parecen estar las observaciones de adultos realizadas a mitad de Mayo.

Bibliografia
www.granadanatural.com
www.ehowenespanol.com