Archive for the tag 'Parque Natural Sierras de Grazalema'

Paisajes de la Serranía de Ronda: Cuevas de Hundidero y Gato

Andrés Rodríguez González Mayo 13th, 2015

El río Gaduares o Campobuche penetra a través de la Cueva de Hundidero en el subsuelo formando un curso subterráneo de algo más de cinco kilómetros y vuelve a salir al exterior en la Cueva del Gato. El complejo Hundidero-Gato es uno de los mayores atractivos del Parque Natural Sierras de Grazalema aunque no deja de ser muy peligroso atravesarlo especialmente cuando ha llovido. Se necesita un permiso de la dirección del parque.

Control Contra incendios: Medidas en el Pinsapar.

Andrés Rodríguez González Junio 30th, 2014

Control Contra incendios

Como cada verano se ha activado en plan contra los incendios de verano en la Serranía de Ronda. Además de las medidas habituales en terrenos agrícolas, se adoptan otras en zonas de especial protección, así se ha impuesto el Cierre de los Senderos Restringidos en el Parque Natural Sierras de Grazalema, donde hay cuatro senderos restringidos dentro del Parque Natural, El Pinsapar, El Torreón, La Garganta Verde y los Llanos del Rabel. Para acceder a estos senderos es necesario autorización del parque. Sin embargo hay un período en el que por riesgo de incendio hay restricciones, algunos  senderos, que se encuentran en el área de reserva están cerrados al público, y otros  sólo es posible acceder a ellos acompañados por guías de empresas de turismo activo. A partir del 15 de Junio para acceder a estos senderos deberá de contactar con alguna empresa para contratar sus servicios de guía.

El Torreón está cerrado al público, no se puede acceder ni acompañados por guías. Los Llanos del Rabel se puede acceder, no hace falta guías.

El Pinsapar se puede acceder hasta el bosque de pinsapos.

La Garganta Verde se puede acceder hasta el primer mirador si das la vuelta en ese lugar, o si hacemos el recorrido hasta Zahara de la Sierra.

En el Parque Natural Sierra de Las Nieves, lo habitual es impedir el paso de vehículos al Área Recreativa de Quejigales, este año también se ha hecho, concretamente existe una valla cerrado con candado en el Carril de Quejigales a la altura del cruce del Camino de Tolox, por encima de la entrada de La Nava.

 

Paco Marin 19: Fotografía del oeste de Ronda

Andrés Rodríguez González Abril 1st, 2014

Francisco Marín Bustamante nos mostró en esta foto las Montañas que cierran la Meseta de Ronda por el Oeste. La mayoría pertenecen al Parque Natural Sierras de Grazalema.

Ruta de Ronda a Villaluenga

Andrés Rodríguez González Enero 24th, 2013

ARACA presenta

Ruta de Ronda a Villaluenga por Benaojan, los Llanos de Libar y los Llanos del Republicano.

Es una interesante ruta que discurre por algunos de los paisajes más abruptos de la Serranía de Ronda.

El pasado día 20, dieciocho marchadores, justo después de que pasará una potente tormenta, realizamos un espectacular recorrido entre Ronda y Villaluenga a través del camino antiguo que atraviesa los Llanos de Libar y los Llanos del Republicano. Fueron unos 29 Kms de ruta que comenzaron en el barrio de la Dehesa de Ronda, salimos de la ciudad y descendimos hasta la Indiana pasando por los restos del vertedero de residuos en que se convirtió el Arenal de Santander y dejando a la izquierda la depuradora de Ronda. Pasamos por delante de la antigua escuela rural de la Indiana y trá recorrer unos pocos centenares de metros junto a la carretera que va de Ronda a la Estación de Benaojan, abandonamos la carretera por la derecha justo antes del puente sobre el río Guadalevin. Pronto pasamos sobre el puente sobre el río Guadalcobacin que viene de Arriate y se une al Guadalevin para formar el Guadiaro, por la derecha se recibe el arroyo del Cupil, de inmediato llegamos a las vías del tren donde empieza el Parque Natural Sierras de Grazalema. Una vez pasadas las vías tomamos el primer carril a la izquierda, el carril marcha paralelo a las vías del tren teniendo a la derecha los campos de cultivo de Cortijo Grande y la mole caliza del Cerro Mures. Después de dejar atrás un enorme freno que sirvió como punto de referencia para arrojar los fardos de contrabando de las matuteras que años atrás, trapicheaban por el tren de Algeciras, llegamos a la “Pasá de Gibraltar”, donde se cruzaba las vías del tren, la Cañada Real del Campo de Gibraltar y el río Guadiaro,  aún llevamos las vías a nuestra izquierda, pero, poco a poco las abandonamos para ascender por la ladera de la Sierra de Juan Diego a través de una vereda bastante bien conservada, es el Camino Viejo de Benaojan a Ronda, las laderas están cubiertas de esparraguera blanca, zarzaparrilla, palmitos (que son indicadores de clima suave), acebuches y retamas, algunos lirios y jacintos indican que la primavera ya apunta maneras aunque el frío aún la hará esperar. Ascendemos hasta el Puerto de Ronda, son dignos de destacar los cuidados olivares que en la parte alta de la sierra, que se desarollan con los suelos de margocalizas, desde ahí, una brusca bajada por un ancho camino empedrado nos lleva hasta el pueblo de Benaojan.

Atravesamos el pueblo hasta la plaza, seguimos en subida por las calles de su barrio más típico y salimos del pueblo por la calle La Línea, de inmediato encontramos la carretera que va de Benaojan a Cortes de la Frontera, la cruzamos para encontrar en el otro lado un poste indicador del camino que va desde Benaojan a los Llanos de Libar. Continuamos la vereda en ascenso, pasamos dos cancelas de hierro que debemos dejar siempre cerradas para evitar que se salga el ganado. Al pasar la segunda cancela comienza una vereda poco marcada que continúa por una ladera con poco matorral donde va disminuyendo cada vez más según se asciende. A la izquierda queda la carretera de Cortes y la cercana Cueva de la Pileta, a la derecha las grandes alturas del pico Ventana con su característica muesca en el perfil que le da nombre, el ascenso termina en el Llano del Pozuelo donde los espeleólogos investigan grietas y simas que bajan a muchos centenares de metros de profundidad, pasamos por los restos de algunos cortijos, el pozo y abrevadero del Pozuelo con su limpia y fría agua nos proporciona un leve descanso. En los alrededores de los cortijos vemos algunos olivos y almendros, son indicadores del esfuerzo y la dureza de la vida en estos terrenos. Las grandes vacas retintas y algunas ovejas pastando en los alrededores encharcados de lo que fue el cortijo de Gloria nos acompañan hasta que abandonamos el carril para, por la derecha coger una vereda que nos conduce a una empedrada cuesta, es La Escalereta, el camino en el que ahora nos encontramos es el antiguo y ha sido sustituido en uso por el carril que aunque da más vueltas permite un recorrido más cómodo y fácil, de éste camino ya existen referencias en 1.575 (según Manuel Becerra Parra), el camino nos lleva al Puerto de Cufría, con vistas espectaculares sobre las Sierras de Grazalema, una pared de piedra y una angarilla nos permiten pasar a la otra ladera, ya estamos en la provincia de Cádiz, la vegetación vuelve a ser más abundante, quizás a causa de que se pastorearon menos estos terrenos,  o tal vez por ser laderas más umbrías al estar orientadas al norte o quizás sea que los quejigos y encinas fueron respetados y no se convirtieron en carbón.

Llegamos a los llanos de Cufría donde retomamos el ancho carril, pronto llegamos al arroyo que desciende imponente desde el Tunio y al último y más grande de los Llanos, del que todos toman el nombre, el Llano de Libar con el cortijo refugio del  mismo nombre.  Vemos enormes y característicos quejigos de troncos huecos. Una breve parada para comer es interrumpida por un fuerte chubasco de granizo y una brusca bajada de temperaturas, desde el Cortijo de Libar hasta el cortijo del Correo todo el suelo está encharcado y el desplazamiento se ve ralentizado por la lluvia, las bajas temperaturas, los arroyos y el suelo encharcado, abandonamos el llano por la derecha y hasta que no llegamos a la cima del Puerto del Correo no deja de llover, desde allí comienza una peligrosa bajada por la vereda ya que las piedras mojadas resbalan considerablemente, entre aulagas, matorrales de coscoja y encinas de gran porte descendemos hasta los Llanos del Republicano, a la derecha se encuentra la Sima del mismo nombre que ya veremos en otra ocasión. Buscamos afanosamente, ya que empieza a llover de nuevo, el carril que  os conducirá al pueblo de Villaluenga del Rosario. Unas tas de ricos callos, cerveza y café junto a una caliente chimenea nos ayudan a recomponernos de la dura ruta que hemos realizado antes de que el autobús nos traiga de vuelta a Ronda.

 

La ruta en pocas palabras:

Distancia recorrida: 29 kilómetros

Altitud min: 500 metros, max: 1.100 metros

Grado de dificultad:  Alto, incrementado por las inclemencias meteorológicas

Tiempo:   7 horas

Fecha:  20 de enero de 2013

Finaliza en el punto de partida (circular):   No

Opinión: “ESTE ES UN PAÍS SIN FUTURO”.

Andrés Rodríguez González Julio 17th, 2012

Manuel Canto Pérez es una magnífico naturalista que vive en Ubrique, un municipio dentro del Parque Natural Sierras de Grazalema, es un extraordinario botánico, une a sus aficiones con la fotografia otras muchas cualidades como profesional de la Biología y como persona con inquietudes y actividades muy variadas pero con un nexo común: todo lo hace bien.

Ha sido durante varios años Coordinador de la Red Andaluza de Jardines Botánicos en Espacios Naturales, dependiente de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. El texto que sigue es de su autoría y para su difusión tengo permiso del autor.

“ESTE ES UN PAÍS SIN FUTURO”.

La totalidad de la plantilla de Técnicos de Educación de la Red Andaluza de Jardines Botánicos en Espacios Naturales ha sido despedida y enviada al paro el 30 de junio de 2012.

La Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía como propietaria de la Red, y la Agencia Andaluza de Medio Ambiente y Agua como gestora de la misma, así lo han decidido. En épocas de recortes, la Educación (en esta ocasión la que desde hace 10 años se viene desarrollando en estos jardines botánicos andaluces) es nuevamente maltratada, y con ello maltratados los 19 técnicos de educación que venían desarrollando su labor desde el año 2002, así como los más de 60.000 escolares que cada año vienen visitando los jardines botánicos. Una vez más nuestros políticos nos dicen, con estas actuaciones, que no es necesaria la Educación para levantar este país. Educar es Conocer, y Conocer es la mejor manera de Conservar. Nuestros políticos (aunque da vergüenza decir eso de “nuestros”), no entienden que todo lo que gastemos en Educación ahora, se gastará de menos (y de mucho menos) en medidas correctoras, no sólo medioambientales sino de todo tipo, en un futuro muy próximo.

UN PAÍS SIN EDUCACIÓN ES UN PAÍS SIN FUTURO. La Educación Ambiental se hace imprescindible en el mundo en el que vivimos actualmente, pero la escasa valoración de la misma se hace patente con decisiones como esta. Lamentablemente, después de 10 años trabajando en dar a conocer la riqueza y singularidad de la flora andaluza, transmitiendo valores de respeto no sólo para las plantas sino para el medio ambiente en general, a miles y miles de personas (una gran mayoría niños y niñas, que son el futuro de este país) y trabajando por levantar una Red que hoy día es un ejemplo no sólo en España sino en Europa, nos vamos, pero nos vamos con la satisfacción de haber hecho una gran labor y con la satisfacción del reconocimiento de todos los visitantes, porque de los políticos ya conocemos el reconocimiento que tenemos. Os pediría que compartieseis este mensaje. Gracias.

Ruta desde el Puerto de El Boyar hasta Benaocaz por el Salto del Cabrero. Regreso por la Casa del Dornajo.

Andrés Rodríguez González Enero 28th, 2012

Ruta desde el Puerto de El Boyar hasta Benaocaz por el Salto del Cabrero. Regreso por la Casa del Dornajo.
Aprovechando este tiempo tan benigno que estamos teniendo en enero, acompañado de con 30 alumnos de 1º de Bachiller del Instituto Profesor Gonzalo Huesa y los profesores Pilar y Pedro, hemos realizado esta magnífica ruta con un enfoque didáctico y de disfrute del paisaje.
Dejamos atrás el pueblo de Grazalema y ascendemos casi dos kilómetros hasta llegar a un merendero en una amplia curva o a unos metros más arriba donde existe un mirador que nos ofrece una magnifica vista por la izquierda del llamado Corredor del Boyar, un panel nos informa de las sierras que desde aquí se ven, estamos a 1103 metros de altura).  Es más amplio el merendero a efectos de dejar el vehículo.
Como siempre, recordamos los objetivos de la ruta, damos una breve explicación del paisaje que divisamos e insistimos en las medidas elementales de seguridad que debemos tomar tanto para evitar pérdidas y accidentes en el grupo, también que estamos en un Parque Natural donde no debemos molestar a los animales domésticos ni salvajes, no recolectar flora ni salirse de los caminos, no dejar basura y dejar las angarillas y cancelas como las encontremos.
Comenzamos a andar sobre las 9 horas 45 minutos. Una pequeña cancela de hierro situada junto al mirador de la curva, nos permite avanzar en un carril que se adentra hacia el Salto del Cabrero entre pinares y algunos gruesos quejigos, a la izquierda nos acompañan las paredes rocosas de la Sierra del Endrinar. En suave descenso llegamos a las cercanías del Cortijo de las Albarranas, dedicado a una explotación de cabras, muy cerca del cortijo, que queda a unos 50 metros de distancia, en la pared de piedra se abre por la izquierda una estrecha vereda cerrada con una angarilla que es nuestro camino, nos acompañan grandes encinas y quejigos junto a vegetación de matagallos y majuelos, con mucha piedra suelta y grandes bloques de caliza, llaneamos hasta llegar a una explanada que es una gran dolina, un lugar llano entre rocas calizas con fondo de arcillas producto de la descomposición de las calizas. En las laderas de la zona de solana que rodean a la dolina son abundantes los acebuches que crecen entre las rocas aprovechando en escaso suelo que se desarrolla en las grietas de las piedras. Las dolinas son lugares donde se acumula agua en momento de grandes precipitaciones (no olvidemos que estamos en uno de los lugares donde más llueve de España), pero a través de los sumideros el agua caída desaparece bien pronto. Esta gran dolina es el Llano de D. Fernando, dicen que aquí acampó el rey católico cuando conquistó estas tierras.  Descendemos por la derecha junto a una pared de piedra debidamente señalizada hasta llegar al impresionante Salto del Cabrero (934 metros de altura), que presenta paredes verticales de más de 80m de altura, separada por una garganta de 50 m de ancho, en cuyas grietas pueden observarse nidos de buitres y águilas perdiceras.

En realidad es una falla con desplazamiento de enormes dimensiones, dicen que la más grande de Andalucía. Los buitres leonados nos acompañan en nuestra parada. Existen varios paneles informativos. Cuenta la leyenda que un cabrero que vivía en las proximidades del Salto del Cabrero, dio un salto de una pared a otra para llevar leche a su hijo enfermo y sin derramar ni una gota.
Regresamos hasta el llano grande de antes, al de D. Fernando. Desde el Puerto del Boyar hasta el Salto del Cabrero tenemos menos de cuatro kilómetros de distancia. Marchamos ahora por una vereda en dirección sur, una suave cuesta nos lleva hasta el Puerto de Don Fernando, paraje que recibe tal denominación con motivo del paso de los Reyes Católicos por Benaocaz. Cuenta la historia, que estando los monarcas acampados en este lugar recibieron la visita de las mujeres del pueblo, que le hicieron entrega de sus joyas como contribución a la conquista de Granada. Desde entonces, “en Benaocaz, la hembra lo más”. Otros dicen que las mujeres tuvieron que dar la cara ya que los hombres se quitaron de en medio por puro miedo.

En el descenso la senda entre arcillas se transforma en un pedregal. Pronto encontramos una calera bien conservada. La vegetación es escasa y se adosa a las rocas intentado que los afilados incisivos de las cabras no la devoren. Ya se ve el pueblo de Benaocaz.. El descenso se complica, a los lados las paredes rocosas albergan buitres que nos sobrevuelan a corta distancia. Estamos en la parte menos agradecida del recorrido y la más peligrosa ya que al caminar entre piedras sueltas en cualquier momento puede producirse una caída o golpe. Descendemos la Sierra de Don Fernando. Pasamos el puentecito sobre el arroyo Pajaruco, absolutamente seco lo que nos da una idea de la sequía que padecemos. Tras caminar por un pequeño bosque de encinas donde campan los cochinos y las cabras entramos en el pueblo de Benaocaz donde los alumnos hacen un juego de localización.
Tras descansar un rato en la plaza del pueblo salimos de él a través de las ruinas del barrio morisco por el camino de las fuentes. Superamos una fuente de frías aguas, pasamos dos cancelas, a nuestra derecha tenemos la Sierra del Caillo, seguimos en ascenso, el carril se convierte en sendero que atraviesa el arroyo Pajaruco que por aquí lleva agua. El camino a veces no está bien marcado, hemos de extremar las precauciones y buscar los hitos y piedras pintadas de azul. Nosotros cogimos un desvio y no vimos la fuente de las siete pilas aunque si la fuente de Fardela, que pierde el agua y no sale por el caño. Las vistas de los valles y montañas son preciosas, afloramientos de rocas calizas y grandes encinas acompañan a la estrecha vereda hasta llegar a una fuente de tres pilas de piedra, es la fuente del Dornajo donde paramos a comer. Encontramos muchas plumas de gran tamaño, un ala y huesos de un buitre muerto. El camino continúa junto a las ruinas de la casa del Dornajo, a partir de aquí, grandes piedras coronadas por palos verticales marcan el camino que ya no tiene perdida. Muchas dolinas y formas peculiares que la erosión ha provocado en las rocas calizas dan formas caprichosas que parecen esculturas. Ascendemos y encontramos en las zonas umbrías restos de la pasada nevada que sirven para que los alumnos entablen una pequeña batalla de bolas de nieve. Seguimos buscando las pinturas azules, el sendero es ahora una vereda muy estrecha que va girando hacia la derecha. Ya en descenso se ve la carretera de Grazalema a Benamahoma. El descenso se hace más pronunciado hasta llegar a una calera recuperada, desde ahí es necesario tener cuidado con no escurrirse ya que el camino coincide con uno de los arroyos de la cabecera del Guadalete y siempre tiene agua. Tras una corta y brusca bajada llegamos al Merendero y al Mirador del Boyar, fin de la ruta. Son casi las 17 horas. Hemos hecho 17 kilómetros y medio.

Las fotografías que ilustran el texto son de Cristobal Benitez.

Rutas por las Bodegas de Ronda

Andrés Rodríguez González Diciembre 1st, 2010

Rutas por Bodegas de Ronda

Son recorridos organizados por Andrés Rodríguez Glez, de la asociación A.R.A.C.A. (Asociación Rondeña de Amigos de los Caminos Andaluces) en algunas de las 12 Bodegas visitables de la Serranía de Ronda.

Concretamente se han realizado cuatro rutas para visita seis bodegas de los alrededores de Ronda, las tres primeras salidas se hicieron a pie y la última, a la Bodega Cuesta La Viña, en autobús.
Ha sido una actividad muy interesante que esperemos tenga continuidad y podamos seguir disfrutando del entorno y aprendiendo cosas sobre el interesante mundo de las bodegas y viñedos de Ronda con rutas como estas.

El calendario y las rutas visitadas han sido las siguientes:

Sábado 23 octubre  Bodega Los Aguilares.

Sábado 6 noviembre Bodega Conrad

y Bodega El Juncal (también llamada Pasos Largos)

Sábado 13 noviembre Bodega Descalzos Viejos

y Bodega Joaquín Fernández

Sábado 20 noviembre

Visita a la Bodega de La Cuesta La Viña, en Montecorto, el desplazamiento se hizo en autobús hasta la Venta El tropezón de la carretera de Sevilla.

Para conmemorar el 25 aniversario del Parque Natural Sierras de Grazalema, el domingo día 5 de diciembre haremos la Ruta al Pinsapar. Al ser una Zona de Reserva dentro del Parque Natural, tiene el acceso limitado, por ello pedimos y obtuvimos permiso en su momento. Tan solo esperar que las lluvias nos permitan hacer tan interesante recorrido.

Ruta por el río Majaceite

Andrés Rodríguez González Noviembre 18th, 2010

RUTA POR EL RÍO MAJACEITE

El Parque Natural Sierra de Grazalema es considerado uno de los espacios naturales más emblemáticos de Andalucía. Su importancia ecológica hizo a  este espacio natural merecedor de su declaración, en 1977, como Reserva  de la Biosfera, dentro del Programa MaB (Hombre y Biosfera) de la  UNESCO, convirtiéndose en el primer espacio con esta distinción en  España junto a Ordesa. En febrero de 1985 es  declarado como el primer Parque Natural del territorio andaluz.
Este año se celebra su 25º Aniversario, para conmemorar este hecho la Asociación Rondeña de Amigos de los Caminos Andaluces, ARACA, os propone la realización de esta ruta, sin duda la popular del Parque Natural y, una de las más visitadas de Andalucía.

La ruta tiene una longitud de poco menos de 4,5 kms, el grado de dificultad es bajo por lo que resulta de lo más adecuado para hacer en plan familiar, el tiempo estimado para su realización es de apenas dos horas, tranquilamente. Es una ruta sencilla que discurre por el borde del río, iremos acompañados por un esplendido bosque en galería y el murmullo del agua lo que la hace especialmente atractiva. Conecta las poblaciones de El Bosque, donde está el Centro de Visitantes del Parque Natural y Benamahoma, situada a 5 km por carretera de El Bosque en ascenso hacia Grazalema. Se trata, pues, de un agradable paseo entre dos poblaciones, El Bosque y Benamahoma por el río Majaceite, que es llamado también río de El Bosque. Al ser una ruta muy transitada son raras de ver pero allí habitan las tímidas y esquivas nutrias.
El bosque en galería está formado principalmente por chopos, fresnos, olmos, higueras y lianas, acompañados por frecuentes zarzales que sirven de refugio a multitud de aves, como los escandalosos mirlos y el esquivo Martín Pescador que captura con sus zambullidas los peces que habitan en las aguas, entre estos también se encuentran las delicadas truchas. No son solo estos los valores y atractivos que podemos observar en tan corto tramo de río, también podemos ver los intentos de aprovechar el curso de agua para generar energía en los restos de los molinos y la antigua central “Eléctrica de la Sierra”, el recomendable Ecomuseo de Benamahoma o Museo del Agua y los Batanes, utilizados en otros tiempos para tratar la lana. Comenzamos la ruta en Benamahoma, en la entrada hay una rotonda y la Venta del Bujio.
A la izquierda vemos el panel del sendero del rio Majaceite que baja por unas escaleras hacia el rio entre grandes eucaliptus. Allí está la depuradora de aguas residuales, el olor que a veces desprende, puede ser el único punto discordante en un paraje singularmente atractivo. Un panel nos explica la ruta que vamos a recorrer. Hemos recorrido una escasa distancia cuando llegamos a los antiguos Batanes para los Paños de Grazalema aprovechando la fuerza del agua del río. La senda baja a las cercanías del río o se aleja levemente de él entre chopos, zarzales y algún alcornoque. Algo más alejadas del cauce y a veces, cercanas a él, se aprecian terrazas que indican el uso de esos terrenos como huertas. En algunos casos, mezclados con los típicos árboles del bosque en galería sobreviven árboles frutales.
El sendero desciende por una zona pedregosa y con escalones para introducirnos en el umbrío y fresco bosque y las pozas del río. El valle se estrecha y encajona. Pasamos un pequeño puente metálico, seguimos la ruta con tranquilidad sabiendo que la distancia que nos queda la recorreremos en poco más de media hora. Pasamos nuevos puentes metálicos que nos llevan a uno u otro lado del río, así discurre la mayor parte de la ruta, por el borde del río acompañados de pequeñas cascadas y pozas, de invertebrados acuáticos y muros de rocas que parecen querer desprenderse sobre nosotros, hasta el punto que a mediación de la ruta, un cartel nos avisa de riesgo de desprendimiento. Otro de los atractivos para los aficionados a la fotografía y las posibilidades de captar esplendidas imágenes con los contrastes de sombras y luces, el agua y los árboles filtrando los rayos del sol. Cuando llegamos a un amplio carril tenemos dos opciones, o continuar por él hacia el Jardín Botánico de El Castillejo o descender por una vereda de nuevo al borde del río. En caso de ir por el Jardín Botánico podemos pasar a verlo y disfrutar de sus cuidadas instalaciones. Es un equipamiento medioambiental del Parque Natural, en él está representado todo el paisaje vegetal de la zona rondeña.

El cercano pueblo de El Bosque marca el final de la ruta.
En definitiva una ruta perfecta para hacerla en plan familiar, al tener pocas dificultades la pueden hacer personas que se inicien en la práctica del andar por el campo y quieran disfrutar de uno de los Parques Naturales más interesantes de Andalucía.

Concurso Conoce La Serranía: 2ª foto del tercer trimestre del 2010. Nombre del Nacimiento de agua.

Andrés Rodríguez González Octubre 31st, 2010

Presento la foto segunda del último trimestre del año 2010 del Concurso Conoce La Serranía.

Se trata de localizar el nombre del Nacimiento de agua que se ve en la fotografía. Es un lugar muy frecuentado tanto por ciclistas como por senderistas y hasta por lugareños que gustan de pasar un día de campo.

Ya sabeis que entre los máximos acertantes de las fotos que aparecerán a lo largo del trimestre (con esta son dos hasta ahora), se sorteará una estancia parta dos personas en el alojamiento rural Posada del Fresno en el precioso pueblo de Montejaque, en plena Serranía de Ronda,junto al Parque Natural Sierras de Grazalema.

Aguila pescadora

Andrés Rodríguez González Abril 9th, 2009

Aguila pescadora (Pandion haliaetus)
Ave rapaz grande, de color marrón oscuro en las partes superiores, exceptuando la cabeza que es blanca con una especie de antifaz oscuro, el color oscuro del dorso contrasta con la parte ventral que es blanquecino. Sus alas son desproporcionadamente grandes y estrechas. Las garras son de color marfil. Los ojos amarillos y el pico muy afilado. La hembra y los jóvenes poseen una banda pectoral pálida. Muy característico es el antifaz oscuro que empieza en el pico y se une al dorso pasando por la zona ocular. Píleo manchado de pardo-oscuro de forma variable. En algunos momentos su vuelo puede parecerse al de una gaviota. El águila pescadora mide entre 52 y 60 centímetros de alto, con una envergadura que oscila de 152-167 cm. Posee unas plumas alargadas en la nuca que forman una cresta que se eriza con frecuencia.
Se halla distribuida por todos los continentes, exceptuando la Antártida. En España continental desapareció como reproductor a principios de la década de los 80 del pasado siglo XX, aunque la población se ha recuperado, aún se la considera en estado crítico. Los núcleos españoles más abundantes son las Islas Canarias y Baleares. Durante la época migradora pueden observarse ejemplares en cualquier zona de España, especialmente las que pueden ser aptas para la pesca (marismas, embalses, ríos, etc.), llegando a invernar en algunas zonas favorables de Extremadura, delta del Ebro y sur de España (costa y embalses gaditanos y costa de Huelva).
En la comarca se han observado ejemplares invernantes no reproductores en el Embalse de Los Hurones, cerca de Ubrique, también se la ha visto también en el Embalse de Zahara, en el Parque Natural Sierras de Grazalema.

Los ejemplares del norte de Europa son migrantes transaharianos. Pasan el invierno en Africa tropical, aunque cada vez más ejemplares invernan en la península Ibérica. Durante la migración, el paso por la península Ibérica es frecuente, aunque no hay concentraciones tan importantes como otras rapaces en el estrecho de Gibraltar, debido a que puede migrar directamente sobre el mar sin depender de las corrientes térmicas. La mayoría de las águilas pescadoras europeas inverna en países como Sierra Leona y Senegal. Las aves adultas cruzan el Mediterráneo, y las más jóvenes siguen la costa en un recorrido más largo, pero que les permite tomar algún descanso.
El águila pescadora está estrechamente ligada a los hábitats acuáticos con abundancia de presas, con aguas poco profundas, claras y no contaminadas. Los reproductores españoles, suelen utilizar hábitats marinos, nidificando en acantilados tranquilos, construyendo el nido sobre rocas. Se alimenta exclusivamente de peces vivos. La captura de otras presas es excepcional y accidental. Los peces más pequeños suelen medir unos 10 cm. y los mayores unos 60 cm. y pesan entre 100 y 600 g. Las especies más depredadas son las que se mueven cerca de la superficie.
Durante el vuelo de pesca, se cierne a poca distancia del agua. Una vez localizada la presa se lanzan sobre ella desde el aire en picado. En el último momento adelantan las garras las cuales se sumergen en el agua. También puede pescar desde posaderos.
La madurez sexual se alcanza a los 3 años y la primera reproducción tiene lugar entre los 3 y 5 años. En el Mediterráneo la edad media de la primera reproducción es de 4,3 años para los machos y 5,1 años para las hembras.
La esperanza de vida media de un águila pescadora es de 20-25 años.
Las fotografías que ilustran esta información son de Juan Tebar.


« Prev - Next »