Archive for the tag 'Parus major'

FAUNA DE LA SERRANIA DE RONDA: Carbonero común

Andrés Rodríguez González Julio 26th, 2017

FAUNA DE LA SERRANIA DE RONDA
Carbonero común (Parus major)

Orden Passeriformes; familia Paridae
Es un pájaro insectívoro de pequeño tamaño, de colores muy llamativos a base de tonos azulados y amarillentos. Es bastante abundante por todas partes.
Habita en toda España y resulta común en ambientes arbolados, tanto bien conservados como degradados. Tolera muy bien la presencia humana, coloniza con facilidad zonas ajardinadas y parques urbanos, acude a los comederos y se instala en nidales artificiales. En invierno se suele mover en grupos con otras especies de páridos.
Su longitud es de 14 cm y su envergadura de 22,5-25,5 cm
Se trata de una especie fácilmente reconocible por el color amarillo de su cuerpo, que contrasta con el azul de las alas y la cola. La cabeza es de color negro-azabache y con las mejillas muy blancas, salvo en los jóvenes del año, algo amarillenta. Los machos se distinguen de las hembras por poseer una bien visible banda negra que recorre su cuerpo desde la garganta hasta la base de la cola. Las hembras, en cambio, tienen muy poco marcada dicha banda, que se desdibuja en el vientre.
Entre los reclamos más comunes se encuentra el repetitivo chi-chipán, que inunda el principio de la primavera; pero muestra un amplio repertorio, con más de treinta notas. Además, esta variabilidad se ve enriquecida con notables matices territoriales; así, por ejemplo, un carbonero de Sierra Morena emite sonidos poco comunes en las poblaciones del Sistema Central y viceversa.
Bibliografía
www.seo.org

FAUNA DE LA SERRANÍA DE RONDA: Carbonero común. Parajito de agua

Andrés Rodríguez González Marzo 4th, 2017

FAUNA DE LA SERRANÍA DE RONDA
Carbonero común. Parajito de agua (Parus major)

Ave insectívora de pequeño tamaño, muy llamativa por sus colores azulados y amarillentos y sus frecuentes cantos. Su cabeza es de color negro brillante y se distingue por una característica corbata de color negro que contrasta con el color amarillo de su vientre. También es característica de la especie una mancha de color blanco en sus mejillas. El dorso es de color verde y sus patas de color azul. Los machos se distinguen de las hembras por poseer una alargada banda negra que recorre su cuerpo desde la garganta hasta la base de la cola. Las hembras, en cambio, tienen muy poco marcada dicha banda, que se desdibuja en el vientre.
Pertenece al Orden Passeriformes; familia Paridae.
En invierno se suele mover en grupos con otras especies de páridos.
En la Serranía de Ronda se le llama Pajarito de agua ya que cada vez que canta, barrunta agua, sgún información del experto en pájaros José María Canca.
Tiene una longitud de unos 14 cm. Su envergadura es de entre 22,5-25,5 cm
Entre los reclamos más comunes se encuentra el repetitivo chi-chipán, que inunda el principio de la primavera; pero muestra un amplio repertorio, con más de treinta notas. Además, esta variabilidad se ve enriquecida con notables matices territoriales; así, por ejemplo, un carbonero de Sierra Morena emite sonidos poco comunes en las poblaciones del Sistema Central y viceversa.
Habita en toda España y resulta común en ambientes arbolados, tanto bien conservados como degradados. Tolera muy bien la presencia humana, pues coloniza con facilidad zonas ajardinadas y parques urbanos, acude a los comederos y se instala en nidales artificiales. Zonas con árboles frutales y bosques de hoja caduca también son habitad frecuentados por los carboneros.
Su dieta es básicamente de insectos, larvas y semillas. La captura de orugas como puede ser la procesionaria le convierten en un aliado para la conservación de especies vegetales. Si lo que comen es fruta se decantan por aquella que ya puede ser habitada por gusanos.
La reproducción comienza en Abril y continúa hasta Junio. El nido es un conjunto de ramas, hojas secas y musgo que puede encontrarse en huecos de árboles, muros e incluso en las cajas-nido elaboradas artificialmente, pero que suponen una ayuda a la proliferación de ésta y otras especies de aves.
El vuelo del carbonero común es fuerte y bastante acrobático, gracias a su pequeño tamaño revolotea entre la maleza con mucha agilidad, aunque también suele posarse en el suelo y en las charcas de agua en busca de pequeños insectos.

Bibliografía
www.seo.org
www.sierradebaza.org

Pájaros insectívoros

Andrés Rodríguez González Septiembre 30th, 2011

Fauna de la Serranía de Ronda

Los Pájaros Insectívoros
Al conmemorarse durante el primer fin de semana de Octubre el Día Mundial de las Aves, me ha parecido oportuno rendir un particular homenaje a unas Aves especialmente interesantes por los grandes beneficios que nos aportan: los Pájaros Insectívoros.
Las aves insectívoras son un grupo numeroso de diferentes especies, pertenecientes incluso a familias distintas. Sus tamaños, formas y colores son diferentes, y su dieta alimenticia es la característica fundamental que las agrupa, son comedoras de insectos, es decir eliminadoras de plagas importantes.

La mayoría de ellas pertenecen al orden de los Paseriformes, los pájaros, representados por dos familias importantes, los Fringilidos, principalmente granívoros, pero también insectívoros. Tienen un corto y fuerte pico cónico, la lengua y los músculos bucales están muy desarrollados, y las alas son de pequeño tamaño. Suelen ser excelentes aves canoras, como el canario. Es el grupo más extenso de toda la avifauna mundial, engloba unas 500 especies, de las cuales 20 habitan en la península Ibérica. Se distribuyen por casi todos los ecosistemas del mundo, aunque suelen preferir los bosques. Las especies más conocidas que habitan en la península Ibérica son: el pinzón común, el pinzón real, el jilguero, el verderón común, el verdecillo, el pardillo común, el camachuelo común, el canario, el picogordo y el piquituerto común.
La otra familia de pájaros son los Aláudidos, aves canoras pequeñas, propias de Europa y Ásia. Que se alimentan de insectos y otros pequeños invertebrados, así como de semillas, dependiendo de la estación. Las especies más septentrionales son migratorias. Algunas de las especies más conocidas son: la alondra común, la totovía, la cogujada común, la cogujada montesina, la terrera común, la terrera marismeña, la calandria y la alondra de Dupont.

Andalucía, por su situación geográfica, es lugar de paso obligado para millones de aves insectívoras del continente europeo. Cada otoño atraviesan nuestras tierras en su camino hacia África y muchas de ellas optan por invernar en nuestra tierra por el clima y los numerosos hábitats favorables. Se calcula en casi 300 millones las que pasan el invierno en la Península.

Las aves insectívoras, salvo algunas excepciones, no son especies cinegéticas, es decir, que no está regulada su caza.  Oficialmente no existe la caza de paseriformes, sólo está permitida en algunas Comunidades Autónomas, la captura de fringílidos con el argumento de la supuesta necesidad de contar con un contingente de aves para mantener una cría en cautividad de estas especies, para realizar concursos de canto, una actividad denominada silvestrismo, algo totalmente falso.
Aunque no existe caza oficial, existe una caza furtiva importante que actúa bajo la cobertura de la captura de fringílidos. En la caza de fringílidos, el furtivismo es incontrolable y prácticamente imposible de evitar. La finalidad de estas capturas es el comercio ilegal con diversos fines, tales como su exportación y utilización como pájaros de jaula e incluso su consumo como “pajaritos fritos”, que lamentablemente, todavía es frecuente encontrar este “plato” en los bares de muchas ciudades y pueblos. La finalidad de la caza también es lúdica, como la caza de gorriones y otras aves con escopetas de balines.
Las aves insectívoras se encuentran protegidas por ley (Directiva europea para la conservación de las aves silvestres) desde 1902; y por tanto, su captura está prohibida, pudiendo imponerse a los infractores fuertes multas. Pero la realidad es muy distinta, ya que en España, se practica la caza y la captura de muchas aves, tanto de insectívoras como de otras especies no insectívoras.
Como ejemplo de pájaros insectívoros vamos a poner cuatro de los más frecuentes en la Serranía.

Carbonero común (Parus major), es un pájaro de la familia de los Páridos, ampliamente distribuida, siendo muy común en Europa y Ásia, sobre todo en zonas boscosas. Es muy fácil de reconocer, mide unos 14 cm, y presenta una banda negra, que es más ancha en los machos, a lo largo de su pecho amarillo. El cuello y la cabeza son negros, con mejillas blancas. Las partes superiores son verde oliva. Su cola es de color gris. Como muchos otros páridos, dispone de una gran variedad de cantos. Su alimentación consta, básicamente, de insectos y semillas. Gusta especialmente de capturar y comer lombrices. Los insectos los captura bien bajo la corteza de los árboles, bien en el suelo, escarbando con el pico bajo la hojarasca.  Anida sobre todo en agujeros de árboles, huecos en muros y taludes, grietas de rocas, también en cajas nido preparadas por el hombre. Las puestas se extienden entre abril y junio, y constan de entre seis y ocho huevos. Éstos son blancos, con motas rojizas por toda su superficie.

Herrerillo (Parus caeruleus). Es uno de nuestros pájaros más populares, se ven con frecuencia por parques, jardines y casas de campo. El Herrerillo se suele limitar las zonas de hábitat más que el Carbonero Común, gusta de árboles de hoja caduca y suele evitar los bosques sombríos de coníferas. Suelen ser muy silenciosos en verano, donde sólo se les oye a primeras horas de la mañana, los herrerillos vuelven a hacerse notar en septiembre. En esta época se registran con frecuencia grandes bandos de estas aves. Estas migraciones son bastante irregulares según los años. El invierno es una dura época para los herrerillos ya que la comida disminuye considerablemente al ser sobre todo insectívoros, entonces larvas y ninfas ocultas bajo las cortezas y las hojas del suelo. Cría en agujeros de árboles, cajas para anidar o huecos en muros. La puesta es desde abril a mayo, de 8 a 15 huevos blancos con puntos pardo rojizos; incubación, sólo por la hembra, alrededor de 14 días; ambos progenitores alimentan a las crías, que vuelan después de unos 19 días.

El Chochín (Troglodytes troglodytes) es un pájaro de la familia Troglodita, el único de este grupo presente en Europa. Es un ave poco llamativa. Su color es pardo rojizo, con barrado oscuro en alas, cola y flancos. Cola pequeña, a menudo erguida. Canto ruidoso y penetrante. Llamada de alarma ruidosa y muy estridente. Los dos sexos son iguales. En la época de celo, el macho defiende su territorio ardorosamente emitiendo una serie de trinos y de agudos silbidos de una potencia sorprendente para su tamaño. Los machos más hábiles retienen dos o tres hembras; los otros permanecen solitarios. A veces se agrupan varios Chochines para guarecerse, así conservan el calor ya que los inviernos muy fríos ocasionan fuertes mortandades. Captura pequeños insectos, larvas, arañas y semillas pequeñas.

El Petirrojo (Erithacus rubecula) es un ave paseriforme, es decir un Pájaro de la familia de los Muscicapilos. Distribuido por toda Europa, principalmente en la región meridional y occidental del continente, donde habita todo el año en Centroeuropa. Emigra parcialmente en el norte de Europa y norte de áfrica. Tiene el tamaño de un gorrión. Los adultos se distinguen por el color naranja intenso de su pecho y cara, sobre un plumaje pardo oliváceo. Los jóvenes carecen de color anaranjado y son moteados de pardo oscuro y ocre. Destacan sus ojos grandes, negros y redondos. Los polluelos mientras están en el nido tienen el interior del pico de color amarillo verdoso. Es relativamente confiado con el hombre. Vive en bosques húmedos con matorral y zonas de riberas de ríos. Es muy común en parques y jardines. Es muy fácil de atraer a comederos y cajas nido. Es muy abundante en otoño ya que llegan muchos ejemplares para cobijarse del frío del norte de Europa. En el petirrojo, generalmente es la hembra la que acude a buscar al macho en su territorio. Cuando ella está esperando la segunda puesta, el macho se encarga de la alimentación de la primera. Es un pájaro muy sociable y curioso. Se alimenta, mayoritariamente, de invertebrados pequeños que viven en el suelo. En otoño y en la primavera se alimenta también de frutos pequeños.
Las fotos que acompañan son de Juan Luis Muñoz, a quien agradezco permitir que se usen.