Plantas de la Serranía: GAYOMBA
Andrés Rodríguez González Agosto 4th, 2011
GAYOMBA. Spartium junceum
También llamada vulgarmente Retama de olor. Como curiosidad científica se puede contar que pertenece a un género monotípico, es decir los que tienen una sola especie. El nombre científico deriva del griego spartion, que significa plantas productoras de fibras textiles y empleadas para hacer ataduras. Su origen es la cuenca mediterránea.
Pertenece a la Familia de las Leguminosas, la misma que las habas, guisantes y garbanzos entre otras plantas muy importantes para la alimentación y como fijadoras de nitrógeno atmosférico.
Es un arbusto de 1 a 3 m de altura con ramas delgadas en forma de látigo, similar a otras retamas. Sus hojas son muy pequeñas y tan escasas que puede decirse que carece prácticamente de ellas. Produce abundantes flores desde principios de verano hasta mediados, en nuestra zona, en lugares más frescos puede estar en floración todo el verano. Las flores son de color amarillo dorado, se disponen sobre los brotes verde oscuros. El fruto es una legumbre plana y de color oscuro.
En otras épocas se ha utilizado con frecuencia como diurético y purgante. También para extraer fibras para elaboración de cuerdas o tejidos. De las flores se saca un colorante amarillo.
Actualmente se utiliza para fabricar cestos y escobas.
En muchos lugares de Andalucía la flor de la retama se asocia con la festividad del Corpus Christi.
Suele utilizarse mucho para fijar taludes y márgenes de carreteras, se ha naturalizado en muchos lugares y extendido por las cercanías, pero siempre necesita terrenos expuestos al Sol, aguanta la sequía y los terrenos de poca calidad, de ahí sus uso. Tambien se coloca en las medianas de muchas autovías de la Península por los pocos cuidados que requiere. Se usa mucho para obras de restauración paisajística.
Es muy útil para regenerar terrenos degradados por ser una planta “nitrófila”, es decir fijadora de nitrógeno.
Se usa bastante en jardines por su floración larga y llamativa y sus pocos cuidados. Las flores son muy olorosas, especialmente indicada en zonas de jardines con fuertes pendientes y poco suelo, siempre que sean de solana. No gusta para nada del sol.
Para conseguir una forma compacta del matorral debe podarse a principios de primavera. Es necesario podar únicamente aquellas ramas mal orientadas o en mal estado, también se hace una poda de renovación cada dos años, aproximadamente, para renovar el follaje, para ello se podan las ramas a unos 40 cm del suelo una vez pasado el verano.
Su enemigo son las plagas de pulgones que suelen infectarla.
Se reproduce bien por medio de semillas, pero deben tratarse del siguiente modo, se prepara una infusión en agua caliente, se echan las semillas cuando el agua arranca a hervir, apagando el fuego inmediatamente y dejándola enfriar durante 24 horas. Ese tratamiento es el adecuado a la mayoría de las leguminosas con semillas duras.