Empusa o Mantis Palo
Andrés Rodríguez González Abril 11th, 2011
FAUNA DE LA SERRANÍA DE RONDA
Empusa, Mantis Palo (Empusa pennata)
Es una especie del numeroso grupo animal de Insectos, dentro de ellos pertenece a la familia de las Mantis, que a su vez están emparentadas con las Cucarachas. Es de pequeño tamaño, solo hasta tres centímetros.
Habita en la Península Ibérica extendiéndose por Francía. En la Serranía de Ronda es frecuente en todo tipo de hábitat, la he encontrado desde lo alto de Sierra Hidalga hasta en zonas ajardinadas de la ciudad de Ronda, desde zonas con matorral seco hasta bordes de arroyos.
Esta mantis es una especie muy estililizada, lo que unido a su pequeño tamaño y a su costumbre de estar quieta acechando a sus presas, pasa fácilmente desaparcibida. Presenta una cabeza pequeña triangular con una protuberancia entre las dos antenas, toráx largo y estrecho y un abdomen corto y curvado. Como todos los insectos tiene seis patas. El primer par de patas se localiza en la parte anterior del tórax, son grandes y robustas, adaptadas para capturar otros insectos, mientras que las otras cuatro se localizan más abajo. Los adultos poseen alas, pero las lasvas no. Siempre tienen rugosidades en la piel (que como en todos los insectos es de una proteína muy dura llamada Cutícula. Tienen siempre color ocre, que las camufla con la hierba seca en la que habitan. Los machos adultos tienen antenas en forma de pluma.
Son depredadores, acechan inmóviles a otros insectos de pequeño tamaño y a arácnidos, solo mueven la cabeza en todas direcciones, cuando se aproxima la victima realizan un rápido movimiento de sus patas anteriores, atrapándola y rodeándola con las patas, después se la comen. Adoptan un color parecido al del entorno donde viven, así pasan más desapercibidas.
Tiene metamorfosis, lo que significa que desde el estado de huevo hasta adulto, presenta grandes diferencias en las formas por las que pasa.
La foto, magnífica como todas las suyas, es del extraordinario fotógrafo de naturaleza, Juan Tebar.
Al parecer la hembra no tiene la costumbre de devorar a su compañero durante al apareamiento como hace la Mantis Religiosa.